Entre los 150 candidatos a diputados federales, entre titulares y suplentes por las coaliciones y partidos políticos por los 15 distritos en Puebla, hay una amplia lista de políticos ‘chapulines’, otros que buscan la reelección, unos más que enfrentan denuncias penales y otro tanto que son familiares o amigos de líderes partidistas o de alcaldes.
En esa situación se encuentran principalmente los candidatos de las coaliciones Juntos Hacemos Historia, Va por México y del partido Movimiento Ciudadano.
En esa lista hay aspirantes investigados como Carlos Morales Álvarez, o la hija de Carlos Martínez Amador, presidente del PRD; la hermana de Aquiles Córdova, del líder nacional de Antorcha Campesina, Hersilia Córdova; Liza Aceves, allegada a la alcaldesa Claudia Rivera; además de los seis diputados federales que van por la reelección.
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En MTPNoticias te presentamos quiénes son los candidatos, opciones, por las que los poblanos votarán el próximo 6 de junio.
Las ‘reelecciones’
Son en total seis los diputados federales que buscan permanecer en el cargo por los próximos tres años. Ellos son: Inés Parra Juárez, Mauricio Toledo Gutiérrez. Alejandro Carvajal Hidalgo, Julieta Kristal Vences Valencia, Nayeli Salvatori Bojalil y Saúl Huerta Corona, los seis contendientes por la alianza Juntos Hacemos Historia.
De todos ellos, Inés Parra es el perfil que mayor número de quejas ha generado entre los morenistas, al tachar de injustificada su postulación, pues tras casi tres años de legislatura no ha presentado ni una sola iniciativa propia.
Los “investigados”
Pese a enfrentar denuncias penales, partidos políticos postularon a varios aspirantes que son investigados, uno de ellos es Carlos Morales, quien busca ser electo como el representante del Distrito V por Texmelucan; no obstante, es investigado por los delitos de operaciones simuladas, lo cual fue exhibido por MTPNoticias en febrero de este año y desembocó en las denuncias presentadas por la Auditoría Superior del Estado (ASE).
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Otro bajo este mismo tenor es el candidato del PT Mauricio Toledo, quien también compite por el distrito de Texmelucan y es investigado por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, por enriquecimiento ilícito, durante su paso como exdelegado de Coyoacán.
Otro es José Luis Rechy Tirado, exalcalde de Cuyoaco, quien fue postulado como candidato a diputado federal por el partido Redes Sociales Progresistas, por el distrito III, pese al escándalo que enfrentó por el cierre de sus gasolineras, donde supuestamente vendía huachicol. Pero además su hija Anabel Rechy, alcaldesa con licencia de Cuyoaco, es candidata a diputada federal de Movimiento Ciudadano por le distrito VIII.
Los “beneficiados”
El nepotismo fue uno de los ingredientes principales para designar a los candidatos que competirán por las diputaciones federales de Puebla, para la jornada electoral del próximo 6 de junio, pues al menos tres familiares de dirigentes partidistas lograron su postulación.
Uno de los casos más evidentes de nepotismo en el proceso electoral 2021 es el de Karla Martínez Lechuga, quien es candidata a diputada federal por el Distrito 1 con cabecera en Huauchinango.
Sin experiencia en política y mucho menos en cargos públicos, el nombre de la joven aparecerá en las boletas gracias a que su papá, Carlos Martínez Amador, es el presidente estatal del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Sin embargo, el líder del Sol Azteca negó la imposición de su hija como candidata, pues durante la presentación de perfiles, que se realizó en meses pasados, aseguró que la designación se efectuó desde el Consejo Nacional del partido.
La candidatura de la actual diputada federal de Morena, Julieta Kristal Vences Valencia, ha sido ampliamente criticada por militantes de su propio partido político, al señalar un evidente conflicto de intereses en su postulación.
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Y es que Vences Valencia, quien busca su reelección en el Congreso de la Unión, es esposa de Carlos Evangelista Aniceto, delegado nacional en Puebla e integrante de la Comisión Nacional de Elecciones (CNE).
Es decir, su esposo tiene injerencia directa en la designación de candidatos al interior de Morena, por lo que pudo haber incurrido en prácticas de nepotismo para asegurarse que su pareja sentimental tuviera su lugar como candidata.
El candidato a diputado federal por el Distrito 1 de Huauchinango, Marco Antonio Natale Gutiérrez, es otro de los que resultaron beneficiados por sus lazos sanguíneos.
Natale Gutiérrez fue impulsado por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) para participar en los comicios que se avecinan, ya que su sobrino Jaime Natale Uranga es dirigente estatal de dicha institución.
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Los ‘chapulines’
En medio del actual proceso electoral, distintos perfiles prefirieron ‘chapulinear’ con tal de agarrar alguna candidatura a diputados federales, sin que les haya importado dejar a un lado a sus partidos de origen.
Algunos casos son Carlos Morales y Hersilia Córdova Morán, quienes traicionaron respectivamente a Movimiento Ciudadano y al PRI, para convertirse en los abanderados del PRD por los distritos V y XIII, respectivamente.
Uno más es el diputado local con licencia Raymundo Atanacio Luna, quien llegó al Congreso del Estado de la mano del Partido del Trabajo (PT), pero después se mudó a Morena.
En este grupo se encuentra Liza Aceves, quien dejó la Secretaría General del ayuntamiento de Puebla, y se quedará con la candidatura de René Sánchez Galindo, ambos allegados a la presidenta con licencia Claudia Rivera Vivanco.
Los ‘cartuchos quemados’
A falta de cuadros competitivos y sin oportunidad para las nuevas generaciones, la alianza conformada por el PAN, PRI y PRD fue uno de los que más recicló perfiles, pues postuló desde diputados locales que buscan dar el brinco al Congreso de la Unión, hasta exdiputados federales que anhelan su regreso a San Lázaro o aspirantes que tras varios intentos pretenden que estas elecciones sean la buena.
Uno de estos casos es el de Ana Teresa Aranda, quien incluso abandonó el PAN en tiempos del morenovallismo, para después regresar y apoyar en 2018 la candidatura de Eduardo Rivera Pérez como candidato por la presidencia municipal de Puebla.
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Otro es Humberto Aguilar, quien busca regresar a San Lázaro después 20 años, además de que también se ha desempeñado como senador y secretario de Acción Nacional. Mismo caso para la priista Xitlalic Ceja, quien ya se desempeñó en el cargo. Además de Mario Riestra y Carolina Beauregard, quienes se han desempeñado como diputados locales y pretenden dar el brinco a las ‘grandes ligas’.
