“Yo creo que le metí huevos por mi hija”, dice una empresaria colombiana luego de ser víctima de un intento de levantón a plena luz del día en la zona de Ciudad Judicial en la junta auxiliar de San Bernardino Tlaxcalancingo en San Andrés Cholula donde gobierna Edmundo Tlatehui.
Los hechos ocurrieron minutos después del mediodía de este viernes 19 de mayo de 2023, cuando la joven mujer caminaba en las inmediaciones de la bodega Aurrerá Exprés, pues se dirigía a comprar un agua de sabor en un negocio local.
“Alguien me agarró de los brazos por atrás, me empezó a jalar y arrastrarme como metro y medio. Comencé a moverme como una loca para poderme safar, se me ocurrió tirarme con todas las fuerzas a un lado de Bodega Aurrerá”, narró.
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Entrevistada por MTP Noticias, la mujer de complexión delgada contó que entró en una crisis de pánico y sólo pudo ver que su agresor de aproximadamente de 1.75 metros de estatura de complexión delgada y sudadera de color azul se fugó en un carro blanco, el cual era conducido por otro hombre.
“El momento fue eterno pero calculo que no duró más de un minuto (…) venía por agua a la Michoacana. No creo que fuera intento de asalto porque llevaba el celular en las manos y no intentó quitármelo, creo que fue un intento de secuestro no sé si con fines de rapto o sexuales”, contó entre lágrimas.
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Intentan levantar a empresaria colombiana en San Andrés Cholula
Cinco horas después del intento de levantón, la empresaria colombiana seguía con crisis nerviosa y las extremidades adormecidas. Comenzó a sentir dolor en su cuerpo e incluso en uno de sus brazos tiene dos rasguños, tras el forcejeo.
“Yo no tenía miedo de salir a la calle y al pasar nuevamente al sitio me dio escalofríos (…) Tengo una hija de 8 años y creo que fue lo que más me llenó de fuerza y dije no me puedo dejar llevar, lo principal era mi hija, de ahí pensé me tengo que soltar”, recuerda.
La joven considera que el que se haya podido salvar de su agresor que le ganaba en estatura y tamaño, fue un “milagro” o algo sobrenatural, pues ella es bajita de estatura, delgada y no hace deportes que requieran fuerza.
“Creo mucho en Dios y que también, como que Dios me dio fuerzas sobrenaturales. Lo atribuyo a un milagro y estoy infinitamente agradecida por esto”, agregó.
Con su testimonio ella busca que otras mujeres estén atentas cuando estén en la calle, pues son muy vulnerables a este tipo de hechos delictivos.
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Por @LuisaTirzo