Con el pasto sumamente crecido, las áreas de bicicletas abandonadas e incluso con el pavimento invadido con yerba, así lucen las instalaciones de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) y que este día fueron entregadas a Cecilia Anaya Berríos, rectora interina quien anunció que el lunes se reanudarán las clases.
Luego de ocho meses de permanecer cerrada, como lo cotejó MTPNoticias al ingresar a la institución, es notorio el descuido de las instalaciones, por ejemplo, algunas de las bicicletas que los alumnos podían tomar las biciestaciones y recorrer así el campus están tiradas en el suelo, con muestras de descuido.
Las características letras naranjas de la universidad que forman el acrónimo UDLAP están cubiertas hasta la mitad por el pasto.
Del área donde estaban colocadas las banderas que enmarcaban el espíritu de comunidad universal de la institución solo quedan las bases metálicas.
El pavimento del campus presenta algo de yerba y las pintas que marcan el camino también lucen un tanto desmejoradas.
Cecilia Anaya refirió que durante el fin de semana se realizará limpieza en la institución pero que habrá áreas que requerirán de más atención además de que se tendrá que hacer el inventario de la institución.
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Campamento de la UDLAP permanecerá en instalado hasta regreso a clases
Los estudiantes que instalaron su campamento afuera de la institución desde el mes pasado informaron que continuarán en la carpa hasta el día lunes.
Al menos una decena de jóvenes son los que se quedarán en el lugar luego de que Cecilia Anaya anunció la reapertura de la institución.
Tras la entrega del campus a la rectora interina fue que anunciaron su permanencia.
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¿Cómo inició el conflicto en la UDLAP?
Fue el 29 de junio del 2021 cuando el nuevo patronato encabezado por Horacio Magaña asumió el control de la institución, luego de que en una sesión del 24 de mayo quedaran excluidos los Jenkins debido a que tienen dos órdenes de aprehensión por presunto desfalco de 720 millones de pesos a la Fundación Mary Street Jenkins.
A la par, se ordenó una auditoría en todos los ámbitos al entonces rector, Luis Ernesto Derbez Bautista, quien era el representante de los Jenkins en este pleito, a quien presuntamente le encontraron desvíos de recursos por al menos 100 millones de pesos por lo que también tiene una orden de aprehensión en contra.
Desde entonces existe un pleito legal entre el antiguo patronato y el nuevo por el control de la UDLAP, y aunque se nombró a Armando Ríos Piter como rector, terminó por renunciar el 8 de febrero pasado al ver que se trata de un litigio legal que va para largo.
Y para no retrasar más el regreso a clases presenciales, el patrono que encabeza Horacio Magaña ha reconocido como rectora interina a Cecilia Anaya y mostró disponibilidad para entregarle la administración del inmueble con el fin de que ya los estudiantes ocupen el campus.
Sin embargo, continuará el pleito en los juzgados tanto por la posesión de la UDLAP como por las investigaciones que existen contra los Jenkins.
