Tras una discusión de más de siete horas se impusieron las reformas del gobernador Miguel Barbosa Huerta para mantener como delito el aborto y conservar el matrimonio como la unión civil exclusivamente entre hombre y mujer.
Pese al discurso progresista de la coalición Juntos Haremos Historia (Morena, PT y PES), diputados de estos partidos se negaron, este viernes, a despenalizar la interrupción del embarazo y permitir los llamados matrimonios igualitarios.
En sesión de las comisiones de Procuración y Administración de Justicia e Igualdad de Género, los legisladores solo obedecieron al pie de la letra las iniciativas que el mandatario envió el miércoles de la semana pasada y las avalaron sin cambios.
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Con ellas se modificarán los códigos Penal y Civil del estado, pero seguirá el desacato a la sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que instruyó al Congreso de Puebla a legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Los cambios se concretaron luego de una confrontación porque la priista Rocío García Olmedo, así como el panista y ahora diputado sin partido, Marcelo García Almaguer, exigían modificar las iniciativas del gobernador.
La morenista Vianey García Romero; María del Carmen Cabrera Camacho (del PT) y el coordinador de la bancada de Morena y presidente del Poder Legislativo, Gabriel Biestro Medinilla, no cedieron y al final impusieron su mayoría.
Al principio de la sesión, que comenzó minutos antes de las 2 de la tarde, García Olmedo demandó cancelar la discusión de las iniciativas al acusar que van contra las derechos de las mujeres y representan un retroceso.
Además reclamó que no se tomaron en cuenta las iniciativas en la materia presentadas por los diputados previamente, entre ellas la suya, que busca despenalizar el aborto durante las 12 primeras semanas de gestación.
García Almaguer recriminó al bloque obradorista el hecho de denominarse progresista, pero a la vez continuar criminalizando a las mujeres.
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García Romero arremetió contra el diputado sin partido y lo tachó de incongruente, porque cuando militaba en el PAN no se pronunció al respecto, por lo que consideró que ahora usa los temas para reivindicarse.
Despenalizar aborto no urge: Biestro
Biestro Medinilla señaló que la despenalización del aborto “no urge” y es un asunto que requiere un análisis profundo, mientras que las reformas de Barbosa Huerta deben aprobarse antes del 9 de octubre.
Esto al señalar que forman parte de las acciones inmediatas que instruyó la Conavim como parte de la alerta de género que declaró en 50 municipios del estado.
Por ello insistió en que debían aprobarse aunque conserven la penalización del aborto y los matrimonios tradicionales, ya que “posteriormente” se abordarán estos temas.
Las reformas de Barbosa
Con las reformas de Barbosa Huerta solo se redujo de cinco años de prisión a uno la pena máxima por abortar, mientras que la denominación del matrimonio se modificó sólo de forma parcial.
Una de las modificaciones consistió en suprimir las fracciones I, II y III del artículo 342 del Código Penal, que actualmente indica que la sanción del aborto se fijará tomando en cuenta “la fama” de las mujeres o si “lograron ocultar” el embarazo.
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Dicho artículo señala: “se impondra?n de seis meses a un an?o de prisio?n a la madre que voluntariamente procure su aborto o consienta en que otro la haga abortar, si concurren las tres circunstancias siguientes:
I. que no tenga mala fama; II. que haya logrado ocultar su embarazo; III. que e?ste no sea fruto de matrimonio. Faltando alguna de las circunstancias mencionadas, se le impondra?n de uno a cinco an?os de prisio?n”.
Al eliminar las tres fracciones, solo quedará el primer párrafo del artículo y el castigo a la interrupción del embarazo sería de seis a 12 meses de prisión únicamente.
Con la reforma de Barbosa Huerta el artículo 342 dirá solamente:
“se impondrán de seis meses a un año de prisión a la madre que voluntariamente procure su aborto o consienta en que otro la haga abortar”.
Por otro lado, el Código Civil vigente establece en el artículo 294 que: “el matrimonio es un contrato civil, por el cual un sólo hombre y una sola mujer, se unen en sociedad para perpetuar la especie y ayudarse en la lucha por la existencia”.
La iniciativa del mandatario consistió en modificarlo para que diga:
“el matrimonio es un contrato civil, por el cual un sólo hombre y una sola mujer, se unen en sociedad para ayudarse en la lucha por la existencia”.
Tras la aprobación de las reformas activistas y organizaciones civiles se volcaron en críticas a Barbosa Huerta y al Congreso del estado por conservar el aborto como un delito y no cumplir con ordenado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
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En febrero de 2017 la SCJN declaró inconstitucionales los artículos 294, 297 y 300 del Código Civil de Puebla, e instruyó al Congreso del estado a reformarlos, pero a la fecha esto no ha ocurrido.
En ellos se señala que el matrimonio y el concubinato son exclusivamente entre un hombre y una mujer, por lo que instruyó a modificarlos para señalar que la unión civil o consensuada puede ser entre dos personas “de diferente o del mismo sexo”.
El fallo de la Corte fue ignorado por la pasada Legislatura y este viernes también por la actual con mayoría de Morena, PT y PES.
Crédito: @e_consulta
Por @MTPNoticias