La estrategia de seguridad del gobierno federal ha fracasado en el combate al robo de combustible, pues ni la Guardia Nacional, ni el uso de drones han logrado disminuir este delito, en el que Puebla ocupa el primer lugar nacional con 717 ordeñas durante el primer semestre de este 2020.
De acuerdo con los datos de Petróleos Mexicanos (Pemex), esto representa un incremento del 125 por ciento en comparación con el mismo periodo del 2019, por lo que en promedio, es clausurada una perforación ilegal cada seis horas.
Estimaciones de la Asociación Mexicana de la agrupación de Distribuidores de Gas Licuado y Empresas Conexas (Amexgas), durante el año pasado el robo de gas representó una pérdida superior a los 13 mil millones de pesos, por lo que cada una de las mil 305 ordeñas detectadas en 2019 dejó una pérdida promedio de 9.8 millones de pesos.
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Puebla, primer lugar en robo de gas LP
Aunque el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha minimizado el problema del robo de combustible, al señalar que este solo era una ‘pantalla’ para disfrazar la corrupción que existe en Pemex, las cifras de la empresa estatal descartan esta versión, pues en seis meses la incidencia aumentó en casi un 82 por ciento de un año a otro.
Se habla del robo de combustible y del ‘hauchicol’, ¿pero saben qué pasaba?, que no funcionaban en sentido estricto las tomas clandestinas, la perforación de los ductos, eso era una pantalla (…) Se robaban la gasolina desde aquí, desde aquí cargaban las pipas porque había contubernio entre la delincuencia y malos funcionarios de Pemex y del Gobierno Federal, eso ya se terminó, imagínense cuántas fugas había”, comentó López Obrador en su pasada visita al estado de Guanajuato.
Cifras oficiales de Pemex dan cuenta que Seguridad Física pasó de sellar y clausurar 516 perforaciones ilegales entre enero a junio de 2019, a 939 detectadas durante el mismo periodo de este año.
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Puebla se consagró como el estado huachigasero, pues del total de tomas clandestinas, el 76.3 por ciento de ellas se han concentrado en la entidad poblana al registrar 717 ordeñas, es decir, tres de cada cuatro que se han reportado a nivel nacional. Esto representa un incremento del 124.7 por ciento, en comparación a las que fueron selladas durante el primer semestre del 2019.
El Estado de México se ubicó en segundo lugar a pesar de registrar una baja en la incidencia delictiva, pues pasó de 117 perforaciones ilegales el año pasado a 104, un 11 por ciento menos.
Mientras tanto, Querétaro pasó de 19 a 50 tomas y Tlaxcala de 20 a 44. Hidalgo y Veracruz cerraron el ranking nacional con 12 y seis ordeñas respectivamente.
Puebla, con pérdidas por más de siete mil millones de pesos
La agrupación de gaseros del país informó en julio de este 2020 que las pérdidas durante el 2019 ascendió a 13 mil millones de pesos, lo que equivale al 10 por ciento de la venta general de gas LP anual.
Esto significa que en promedio cada toma clandestina generó pérdidas por nueve millones 811 mil 320 pesos.
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Siguiendo estos parámetros, al corte del primer semestre del 2020, Puebla acumularía una pérdida por robo de combustible equivalente a siete mil 34 millones 716 mil 440 pesos, solo dos mil 28 millones por debajo de lo reportado el año pasado.
Estrategia fallida
Desde hace tres años, las células criminales dedicadas al robo de gasolina de los ductos de Pemex en Puebla expandieron sus actividades ilícitas al incurrir en delitos como robo a transportistas, robo a negocio, extorsión e incluso secuestros.
Varios capos huchigaseros han proliferado en la región desde ‘Los Cuijes’ y ‘El Comandante 30’, quienes operaban en la región de Xonacatepec y Amozoc, hasta el ‘Loco Tellez’ que expandió sus redes criminales a varios estados y la región norte de Puebla.
Ante esto el gobernador del estado, Miguel Barbosa Huerta, ha criticado la estrategia del gobierno federal, quien ha abandonado a su suerte al estado para hacer frente a dichas bandas.
El robo a gas es de Coatzacoalcos a Guadalajara y pasa por toda esta zona, es un asunto bien complicado, por eso Puebla tiene una gran fortaleza, por aquí pasa todo, pero también es una gran debilidad porque por aquí pasa todo y por aquí se complica todo”, comentó el mandatario estatal asegurando que ni la Guardia Nacional, ni los drones con los que cuenta la Marina han funcionado para erradicar este problema que continua creciendo.
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En el caso de Puebla, es el ducto Cactus-Guadalajara, que atraviesa la región de San Martin Texmelucan y el Triángulo Rojo, el más vulnerable, pues es en esta región donde se han detectado la mayoría de las ordeñas, aunque también existen en la Sierra Norte, sobre todo en la zona limítrofe con el estado de Hidalgo.