El funeral de Arturo Rueda duró 14 meses. Primero en el penal de San Pedro Cholula, y después en el de mediana seguridad en Tepexi de Rodríguez.
Desde un área de aislamiento en el segundo nivel de esa prisión, en donde solamente envían a los reos de alta peligrosidad pasó diez meses, día y noche sin ver la luz, sin enterarse en qué día y hora vivía.
Desde esa oscuridad, sabía que afuera eran más los que aplaudían que el fallecido exgobernador Miguel Barbosa había hecho lo “correcto” en mandar a detenerlo, reviviendo siete años después, una denuncia por el delito de extorsión que había interpuesto en su contra el actual diputado local del PRI, Jorge Estefan Chidiac (en 2015).
Es mentira la versión que se difundió entorno a que buscó suicidarse en al menos tres ocasiones.
Más bien, querían verlo muerto y lo incitaron a quitarse la vida, una y otra vez le hablaron de las técnicas que se podían aplicar para lograrlo, para no sufrir más.
No revelaré más detalles porque sé que el propio Rueda contará cómo fueron esos tiempos de cárcel en un libro.
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Seguramente contará cómo vivió ese funeral y entierro, por que eso es lo que pasó, con la diferencia de que pudo saber quiénes le lloraron, quiénes aplaudieron, quiénes festejaron, quiénes lo escupieron ya estando congelado y quiénes fueron a rematar hasta sus huesos a cambio de unos pesos. Lo sabe.
—¿Quién es Arturo Rueda después de la cárcel?, le pregunté ansiosa por saber, después de que acudió a firmar como parte de la medida cautelar que le impusieron por el delito de extorsión en el juzgado penal de Cholula.
Evadió responder de tajo, pero en su cuello colgaba un rosario que llevaba marcado el mensaje: “no tengas miedo, solo ten fe”, una cita de la Biblia (Marcos 5:35).
—¿Leíste la biblia en este tiempo?, le volví a cuestionar.
—Muchas veces la leí y muchas veces me dio consuelo y esperanza.
—¿Lloraste en la cárcel?
—Mucho, pero ya no haré más comentarios (…)
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¿Es el mismo Rueda de antes, el polémico, el que despotrica todo contra todos?, nos hemos cuestionado muchos.
¿La cárcel ayudó a Arturo Rueda a reflexionar?
Ahora que está libre y después de vivir su propio funeral y entierro, ¿cobrará venganza?
Se lo pregunté fuera de grabadora y me quedo con estas frases (palabras más, palabras menos): “el rencor y la idea de venganza solo te consume más”, “yo no odio a Barbosa y ni celebro su muerte”.
¿Le creemos?
Solo el tiempo nos dirá qué tanto aprendió el autor de ‘Tiempos de Nigromante’ tras las rejas.
—¿Tú saliste a predicar Rueda?, también le pregunté entre broma y enserio, después de que habló de Dios.
—Así es, voy a predicar porque tengo una fe poderosa. También a ustedes les haré llegar estos rosarios que estuve trabajando como artesano textil en Tepexi y que son muestras de la fe y de mi cariño por muchos de ustedes.
Mientras, ya tengo mi rosario…
