Luego de que este pasado lunes, transportistas organizaran un paro parcial para exigir aumento al pasaje, pues con $6.00 pesos es uno de los más baratos a nivel nacional, también es una realidad que los poblanos no están muy contentos con el servicio que se ofrece.
En ese sentido, 7 de cada 10 poblanos reprueban las condiciones en las que se encuentran la mayoría de autobuses, combis o microbuses en las que deben trasladarse, pues informan que las unidades están descuidadas, sucias y muchas veces, no son del todo funcionales.
Según la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental de 2018, elaborada por el Inegi, se reportó que la misma cantidad de ciudadanos que usan el transporte aseguran que no hay un espacio cómodo para viajar en los autobuses o combis.
Recomendamos: Dueños de las rutas 72 y 72 A, entre las más alborotadores en paros en transporte público
Otro dato que arrojó esta encuesta es que un 90 por ciento de los usuarios no está de acuerdo con los horarios de las corridas de las rutas y un 60 por ciento de los encuestados aseguran que los choferes no respetan las paradas autorizadas para el ascenso de pasajeros.
De igual forma, tan solo 3 usuarios de 10 afirman que los conductores son amables, mientras que 2 de cada 10 asegura que han notado que los choferes sí respetan los señalamientos viales, aunque un 60 por ciento sí ‘rescata’ el tiempo que hay entre unidades y que son suficientes.
Pero el mal estado de las unidades, choferes irrespetuosos, no es todo, también la inseguridad ha atacado fuertemente al transporte público, pues según informó el Consejo Ciudadano de Seguridad y Justicia de Puebla que el estado se ubica en el tercer lugar a nivel nacional con más atracos.
Además, de acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad se detalló que al menos un 20 por ciento de usuarios en la zona metropolitana de Puebla y Tlaxcala ya no usan el transporte público precisamente por la inseguridad.
El transporte público de Puebla asegura que su exigencia para el aumento de pasaje es fundamentada, pues informa que no ha aumentado en más de 8 años, mientras que la gasolina y refacciones cada vez son más costosas.
Como dato, Baja California cuenta con el pasaje más caro, a $15.50 pesos, y entre los más “baratos” está Aguascalientes, con $7.50 pesos, al igual que la CDMX, pero en la capital del país aumenta según la distancia y oscila entre los $5 y $7 pesos, aunque es importante señalar que en Jalisco cuesta $13.00 pesos, pero tiene transporte de lujo con clima y pantallas de televisión.
Lee más: Ahora van tras publicidad sexista en transporte público