Uno de los tantos casos de feminicidio que volvió a dar de qué hablar es el de Mara Fernanda Castilla, quien fue cruelmente asesinada en septiembre de 2017, pues este día se reveló que unas pruebas presentadas por la defensa de Ricardo Alexis, su presunto feminicida, abrieron un panorama distinto sobre el homicidio, ya que se presume que todo podría tratarse de una venganza.
De acuerdo con La Silla Rota, el asesinato de Mara podría haber sido orquestado por el crimen organizado de Veracruz debido a la relación sentimental que sostuvo la víctima con uno de los integrantes de un grupo criminal.
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Según el medio antes mencionado, el comienzo de esta cadena fue con Antonio Sebastián Préstamo Rivera, quien era estudiante del Instituto Tecnológico de Monterrey y fue secuestrado en la entidad. La última vez que se le vio con vida fue el 6 de febrero de 2015, alrededor de las 16:00 mientras conducía su vehículo marca Mercedez Benz, modelo 2015 con placas de circulación TZZ-2354.
Sólo un día después de haber retenido al joven contra su voluntad, lo asesinaron y dejaron sus restos en Xalapa, Veracruz, de donde era originaria Mara, quien fuera alumna de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep).
Gracias al trabajo de la Policía, se logró la detención de Edson Aldair Hernández Sangabriel, de diecisiete años, y de su primo, Rafael Barradas Hernández; sin embargo, en aquel entonces, la Procuraduría General de Justicia de Puebla dio a conocer que había un tercer implicado en el plagio, quien estaba prófugo, y que más tarde sería identificado como Christopher Alfredo Reyes Matus, el novio de Mara Fernanda.
Un par de meses después, la mañana del 11 de junio, Reyes Matus fue encontrado torturado y asesinado en su departamento y fue precisamente Mara quien descubrió el cuerpo cuando llegó a visitarlo.
Tras este hecho, la Fiscalía de Veracruz solicitó la declaración de Mara, por lo que su madre accedió a que esta hablara, ya que era menor de edad y requería su permiso; gracias a los datos que dio, se pudo identificar a otros miembros de la banda a la que estaba vinculado su novio.
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Para septiembre de 2017, tras la desaparición de Mara Fernanda Castilla, su hermana Karen acudió a la Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla, y cuando la interrogaron sobre alguna relación violenta que pudo tener la víctima, salió el nombre de Christopher Alfredo Reyes Matus.
Sin embargo, en ese momento, no hubo una línea de investigación que iniciara la FGE al respecto, por lo que se concentró en imputar delitos al conductor de Uber, Ricardo Alexis, quien permanece en el penal de San Miguel en espera de sentencia.
Ahora, la defensa del conductor de servicio ejecutivo pidió que se amplíe la declaración de Karen Castilla para exponer que la muerte de Mara Fernanda se trató de una venganza por haber encontrado el cuerpo de Reyes Matus y dar el testimonio que permitió que ubicaran a los miembros de la banda y no un feminicidio imputable a Ricardo Alexis, quien ha ganado varios amparos ante la justicia federal, al grado que el cargo por feminicidio quedó insubsistente y obligó a la FGE a buscar nuevos elementos de prueba para presentar el caso ante el Poder Judicial de Puebla.
Asimismo, la defensa del imputado solicitó la declaración de Gabriela Miranda, madre de Mara, para que confirme que en 2015 autorizó a su hija a declarar sobre el asesinato de Reyes Matus. Debido a lo anterior, la madre y hermana de Mara solicitaron un amparo que hasta el momento ha evitado que declare, y todos están a la espera de contestación de una segunda solicitud.
Con información de La Silla Rota, e-consulta y Milenio
Fotografía: Liberal y El Heraldo