En un acuerdo inédito, este jueves el Congreso del Estado autorizará a los 217 ayuntamientos del Estado la contratación de créditos, con lo cual los presidentes municipales tendrán luz verde para endeudarse para los próximos tres años.
No obstante los alcaldes estarían comprometiendo como fuente de pago los recursos del Fondo de aportaciones para la Infraestructura Social Municipal (FISM), los cuales están destinados al financiamiento de obras, acciones sociales básicas e inversiones que beneficien a la población que vive en pobreza extrema y rezago social.
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Aunque hasta el momento se desconoce una justificación para tal autorización, se sabe que son varios los municipios que enfrentan problemas financieros heredados por las administraciones anteriores.
Los coordinadores y representantes legislativos de todos los partidos políticos representados en el Congreso del Estado, acordaron presentar este jueves una iniciativa de decreto para autorizar el endeudamiento a los ediles.
Para ello, los funcionarios municipales facultados para ello, como los tesoreros municipales o administradores, podrán buscar opciones de financiamiento con las instituciones de crédito que forman parte del sistema financiero mexicano.
“Se autoriza a los 217 Municipios del Estado de Puebla, para que durante la gestión de la administración municipal 2021-2024, por conducto de funcionarios legalmente facultados gestionen y contraten con cualquier institución de crédito integrante del sistema financiero mexicano que ofrezca las mejores condiciones de mercado, uno o varios financiamientos, hasta por el monto, para el destino, plazos, términos, condiciones y características que en éste se establecen”, señala el acuerdo que este día será sometido a discusión y aprobación del Pleno.
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Los alcaldes podrán afectar, es decir tomar, los recursos del FISM como fuenre de pago del financiamiento que contraten, ya que este dinero lo administran directamente los municipios.
El FISM representa uno de los ingresos más importantes para algunos de los municipios más marginados, pues a través de este se realizan acciones para el combate a la pobreza y marginación.
Junto con el FAIS (Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social) de tipo estatal, el FISM integra los recursos del Ramo 33.
Los alcaldes que afecten estos recursos para cubrir el pago de deuda, en caso de que sea adquirida, dejarían de realizar obras de agua potable, alcantarillado, drenaje y letrinas, electricidad rural, caminos rurales y de infraestructura básica en salud, educativa y productiva rural, que son los rubros a los que se destina el FISM.
Por Cirilo Calderón / @calderonciro
