Una camioneta de los servicios funerarios abre paso al cortejo fúnebre, mientras la música de banda toca la canción de ‘Amigo’ de Roberto Carlos. Primos y tíos cargan el ataúd y llevan a su última morada a Obed, el migrante poblano asesinado por pandilleros durante una disputa en uno de los vagones del metro de Nueva York.
Este lunes 19 de febrero de 2024, familiares y amigos dieron el último adiós al hombre que dejó su natal Tehuacán hace dos años en busca del sueño americano.
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Samantha, esposa de Obed, camina frente al contingente, se aferra a la fotografía de su esposo, la cual lleva entre sus brazos.
A su lado una mujer coloca incienso al sahumerio para que arda y emane humo. Esto indicaría el camino a su última morada al alma de Obed.
Los últimos momentos con Obed
Familiares y vecinos caminan por varias calles desde el templo del Sagrado Corazón de Jesús en el Infonavit El Riego en Tehuacán. Cerca de las 15:00 horas el cortejo fúnebre llegó al panteón ejidal de ‘San Bernardino’ en la colonia San Juan Tula.
La banda de viento hace una breve pausa, espera que acabe de entrar el cortejo fúnebre y rodeen el lugar donde han rascado para enterrar a Obed.
Comienza la despedida, el momento más difícil, el entierro. La banda reanuda con la de ‘Amor Eterno’ de Juan Gabriel.
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Primos, tíos, amigos, hermanos, sus padres, suegros y su esposa, toman un puño de tierra y lo lanzan sobre el ataúd que desciende.
Sufre la familia del migrante asesinado en Nueva York
Obed dejó a su esposa Samantha y a sus dos hijas de 12 y siete años de edad. Viajó a otro país en busca de mejorar su calidad de vida y con la promesa de regresar este diciembre de 2024.
El 12 de febrero de este 2024 después de su jornada laboral viajaba en el metro de Nueva York, cuando integrantes de dos pandillas se disputaban a balazos el control de uno de los vagones.
El hombre fue herido de bala. Antes de su último suspiro le alcanzó a llamar a su esposa, no pronunció palabras y murió.
“Se fue uno de los pilares de la casa, deja a sus niñas y a su esposa, será muy difícil para ella. Eso es lo que más nos preocupa”, dice el tío paterno, Ascensión Beltrán.
El hombre de estatura baja, lentes y tez morena, recuerda a Obed como un hombre trabajador y asegura que dejó su tierra en busca de una mejor vida para su familia.
