Karen murió al practicarle una cesárea en un hospital del IMSS en Mexicali por una supuesta complicación clínica, pero el Servicio Médico Forense asentó que la causa del deceso es indeterminado toda vez que se encuentra impedido porque el cadáver carece de órganos en cabeza, tórax y estómago.
Las familias Vallejo Castro y Cortés denunciaron dolo por parte del personal médico del área de maternidad del Hospital 31 de Especialidades que atendió a Karen Vallejo, y acusaron de negligencia en la atención postparto y en la liberación y tratamiento del cadáver.
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Acusaron que nunca se les notificó la complicación clínica que terminó con la vida de la mujer de 31 años después de dar a luz a un niño mediante una cesárea en ese nosocomio. Durante el embarazo los médicos del IMSS no detectaron nada irregular en la madre ni en el producto.
La tarde del domingo, personal médico insistió en hacer una autopsia médica al cadáver de Keren e incluso condicionaron la entrega del cuerpo, porque querían determinar “la causa de la muerte” antes de enviarlo al Servicio Médico Forense para la necropsia de ley.
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La hermana y el esposo de la víctima informaron que en SEMEFO les notificaron que el IMSS nunca les había entregado para la necropsia un cadáver sin ningún órgano como en este caso que representa una violación a la normatividad y al Código Penal.
Explicaron que existe una serie de irregularidades en que incurrió el IMSS desde el domingo que se registró el deceso hasta este miércoles que les entregaron el cuerpo de la víctima.
La tarde del lunes 31 de enero presentaron una denuncia en el Centro Estatal de Justicia Alternativa del Poder Judicial de Baja California por el delito de responsabilidad médica y técnica del personal del IMSS, de acuerdo al RAC 0202-2022-03695.
El coordinador del Semefo César González Vaca confirmó que el cadáver de Karen no tenía ni un solo órgano cuando se los entregaron por disposición de la Fiscalía General del Estado.
González Vaca manifestó que el certificado de defunción que emitió el IMSS carece de validez jurídica para determinar la causa de la muerte y se mantiene indeterminada ya que los médicos legistas carecen de elementos científicos y de procedimiento para establecerlo porque no existe ningún órgano.
Ningún patólogo en Baja California retira todos los órganos de un cuerpo ni siquiera un órgano entero, solo muestras para realizar los estudios.
Dijo que debe ser el IMSS quien declare porqué optaron por una autopsia clínica y por retirar todos los órganos.
La delegada del IMSS en Baja California, Desiree Sagarnaga, aseguró que el retirar todos los órganos de los cadáveres es un “procedimiento habitual” en las autopsias clinicas que realiza la institución para “brindar certeza y sirve de retroalimentación”.
Por @MTPNoticias/ Metropolitano Puebla
Crédito: La Jornada