El presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso del Estado, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, negó que se entregue un cheque en blanco a los municipios, luego de que se les autorizara contraer deuda para los próximos tres años.
Este jueves en sesión ordinaria, el Pleno del Congreso del Estado aprobó por unanimidad de votos el decreto por el que se autoriza a los 217 municipios contratar créditos con instituciones financieras.
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Al respecto, el líder del Congreso local explicó que el manejo de los recursos extras que obtengan los ayuntamientos mediante el endeudamiento estará sujeto a reglas de operación, pues estos no podrán destinarse a gasto corriente.
Céspedes Peregrina rechazó posibles afectaciones a la calificación crediticia al permitir que los municipios contraten deuda, por el contrario, explicó que los municipios que actualmente están endeudados no podrán contraer un nuevo crédito.
#LaGrilla ?| El presidente del @CongresoPue @SergioSalomonC negó que se entregue un cheque en blanco a los alcaldes con la autorización que se les dará para endeudarse, pues deberán cubrir ciertas condiciones para solicitar créditos. | vía @calderonciro pic.twitter.com/nfbCeJEPKF
— MTP Noticias (@MTPNoticias) December 2, 2021
El dinero de la deuda deberá estar dirigido a proyectos en específico con previa autorización de Banobras, con el fin de que puedan ejecutar obras prioritarias para la población. El endeudamiento está tasado al 25 por ciento de los recursos que por concepto del Fondo de aportaciones para la Infraestructura Social Municipal (FISM) recibe cada municipio.
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La autorización de endeudamiento está dirigida a municipios grandes y pequeños, añadió, para aquellos que registran dificultades para cubrir el pago de obras prioritarias. La Secretaría de Planeación y Finanzas deberá verificar que los municipios cumplan con ciertas condiciones para acceder a la línea de crédito.
Además los recursos no podrán destinarse a otros rubros como gasto corriente, por lo que deberán acatar las reglas de operación que sigue el FISM, el cual se destina a obras para el combate a la pobreza y la marginación de las localidades.
“Quien no lo maneje dentro de las reglas del FISM se le señala como desvío de recursos, no hay forma de que se apropie para otra condición, no es para gasto corriente”, expresó Sergio Salomón Céspedes.
Por Cirilo Calderón / @calderonciro
