Créditos de hasta un millón de pesos o más, sin aval, ni garantías, ni firmas, con intereses de menos del 0.5 por ciento mensual, ofrece Captiva Services, para enganchar a sus víctimas y estafarlas.
Se trata de una de tantas financieras que operan en edificios en zonas de alta plusvalía en Puebla y en redes sociales.
Cuando están por ser denunciados o exhibidos, “asesores” y representantes de la financiera cancelan sus líneas, cambian de ubicación y hasta de nombre y desaparecen.
Captiva Services, se hizo viral luego de que una de sus víctimas, Catarino de 55 años de edad, entró en desesperación e irrumpió en las oficinas ubicadas en el edificio Omega de Plaza Centro Mayor en Zavaleta, para amagarlos con una escopeta y exigir la devolución de su dinero.
Y es que el único requisito que financieras como Captiva le ponen a los solicitantes de créditos, es depositar el cinco por ciento del monto del préstamo que desean.
Especialistas y autoridades, recomiendan que se debe dudar cuando algo suena muy fácil.
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Catarino casi mata a empleados de Captiva tras descubrir fraude
Este lunes 13 de mayo de 2024, Captiva que venía operando al menos desde enero de este año en el edificio Omega de Plaza Centro Mayor en Zavaleta, Puebla, se viralizó cuando uno de sus defraudados intentó recuperar su dinero de manera violenta.
Catarino un hombre de 55 años de edad, irrumpió minutos después del mediodía con una escopeta escondida entre sus ropas.
Ingresó a las oficinas que estaban ubicadas en el quinto piso, para exigirle a las empleadas y los empleados, el dinero que le habían prometido o la devolución de lo que el depósito.
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Las tres mujeres y el hombre presentes no supieron darle respuesta y solamente le daban largas.
El hombre se molestó sacó su arma, hizo detonaciones y los amarró de pies y manos con una cinta adhesiva.
Fue necesaria el ingreso de elementos del grupo táctico de la policía municipal de Puebla para rescatar a los empleados y someter a Catarino que hasta el día de hoy se encuentra detenido.
Mientras a Catarino están por procesarlo por intento de homicidio, secuestro y portación de arma de fuego, mientras Captiva desmanteló sus instalaciones y desapareció el mismo día.
Sin embargo, mantienen activos algunos números, de los que se hacen llamar asesores y continúan a distancia haciendo trámites y convenciendo a los interesados para que saquen un préstamo con ellos.
¿Cómo enganchan financieras como Captiva para defraudar a la gente?
MTP Noticias obtuvo un número de la financiera Captiva Services, de un supuesto representante de nombre Jonathan.
Pero al llamar y solicitar un crédito responde otro que se hace llamar Raúl Rodríguez.
Al preguntar sobre los requisitos para la solicitud de un crédito de 500 mil pesos, el supuesto asesor dijo que de cinco a siete días entregarían la cantidad.
Esto, después de que depositáramos a su número de cuenta, el cinco por ciento del monto solicitado, cantidad que prometieron devolver cuando se terminara de pagar el crédito.
“Ese dinero es por si usted se atrasa en uno de sus pagos, nosotros lo jalamos, pero si se pone al corriente obviamente al final que acabe de pagar se le devuelve”, dijo el asesor.
El hombre nos convencía de pedir un monto de un millón de pesos e insistía en que sus tasas de intereses son más bajas que cualquier banco.
“Tenemos el interés más bajo, incluso de lo permitido por el Banco Nacional de México, que si usted revisa anda por arriba de los 6.3 por ciento que pedimos”, explicó el hombre al teléfono.
Por un crédito de un millón de pesos ofreció una tasa de interés de 6.3 por ciento, es decir que al final del crédito los interesados pagaríamos solo 63 mil pesos de interés anual.
Cuando se les pidió su ubicación para llevar los documentos (comprobante de domicilio, copia del INE y estados de cuenta bancarios de los últimos dos meses) dijeron que únicamente teníamos que tomarles una fotografía o escanearlos.
Además pidieron tres referencias, a las cuales ellos pudieran llamar para asegurarse que “éramos confiables”.
En varias ocasiones se intentó entrevistarse personalmente con el asesor, pero insistió en que no era necesario y era conveniente hacer el trámite por Whatsapp.
Al cuestionarlo sobre la necesidad de firmar un contrato para que respeten el porcentaje de interés solicitado, respondió que no era necesario vernos, que lo iba a escanear y enviarlo al WhatsApp.
