Uriel Vázquez Sandoval tenía 34 años de edad, era comerciante, trabajador y mayordomo de la iglesia de Tepexilotla, municipio de Zoquitlán, Puebla.
A Uriel, a su esposa, Angélica Rivera de 27 años de edad; y a sus hijos Uriel Abad e Iker de nueve y siete años, los asesinaron la noche del viernes seis de octubre de 2023 en el barrio de Dos Caminos.
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Según el relato de familiares, los vecinos fueron testigos de que antes de que se incendiara la casa, los asesinaron a balazos.
Este matrimonio tenía una tienda de Liconsa, donde además de vender productos de la canasta básica, vendían un poco de gasolina que era adquirida en una gasolinera de la región, ya que en la comunidad no hay dónde surtir las unidades.
“Mi primo no es ningún delincuente, era comerciante, le hacía de todo, era una gente tranquila y la gente puede dar garantía de que no era delincuente”, dijo un familiar de Uriel.
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¿Uriel de Tepexilotla en Zoquitlán, tenía enemigos?
Uriel no tenía enemigos, era una persona trabajadora e incluso era mayordomo de la iglesia; sin embargo meses atrás lo amenazaron de muerte por un hombre.
Familiares de Uriel y Angélica contaron que hace meses personas identificadas les quitaron a varias familias de Tepexilotla el agua de un riachuelo, que era propiedad de la familia Sandoval.
“La gente agarraba agua para autoconsumo, la gente conectó sus mangueras. Un señor con otras personas les cortó sus mangueras y el único que se enfrentó a él fue Uriel Vázquez y ese hombre lo amenazó de muerte y le dijo que tarde o temprano se iba a vengar de él o de su familia”, narró el primo de Uriel.
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El que lo amenazó está plenamente identificado y si Uriel no denunció, es porque la ley de esa comunidad así es, las cosas no trascienden, agregó.
“Tuvieron que pagar niños y una familia inocente y trabajadora. Uriel no era delincuente era mayordomo de la iglesia y para tener ese cargo es porque la gente confiaba en el”, expresó.
Evidenció que en la comunidad de Tepexilotla la gente vive atemorizada y no denuncia las desapariciones forzadas ni cobro de piso.
“Que puede haber represalias, sí. Que ya hemos recibido amenazas, sí, pero alguien tiene que dar el primer paso para que esto se sepa”, expresó.