Julieta Cerezo
La capital poblana vive su año más sangriento y macabro pues alrededor de 3 cadáveres son encontrados cada mes en este municipio. Entre marzo y este mes, los cuerpos de 16 personas – en su mayoría, sin identificar – han sido abandonados, arrojados o sembrados por toda la demarcación.
El recuento realizado por MTP Noticias exhibe que los meses más sangrientos de este año han sido los de mayo y julio. Y es que en el antepasado mes se encontraron cinco cadáveres, maniatados o torturados, entre ellos el de un menor de edad. En el actual mes, han sido encontrados cuatro cuerpos que fueron violentamente asesinados.
Los 16 cuerpos corresponden a un mismo número de varones, en 14 casos no se dio con la identidad de los hoy occisos y solo 2 pudieron ser reconocidos.
Periférico y Bosques de Manzanilla, zonas más recurrentes
Las zonas “comunes” para que diversos grupos delictivos arrojen los cuerpos de sus víctimas son Periférico Ecológico y Bosques de Manzanilla, en el primer punto han sido encontrados cuatro cuerpos y en el segundo tres de ellos.
Los cadáveres de Bosques de Manzanilla, colonia ubicada en el Camino Viejo a La Resurrección, fueron hallados este mes, es más, todos fueron encontrados en menos de una semana. Además, en la zona de La Resurrección suman dos cuerpos encontraos, uno en junio y otro en mayo.
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La extensión del Periférico Ecológico ha dejado el macabro hallazgo de cuatro cadáveres, el primero en marzo y tres consecutivos durante mayo, todos fueron ubicados en diferentes puntos de esta arteria vial.
Ajuste de cuentas, la causa
En los reportes periodísticos consultados se apunta que la causa de los asesinatos serían posibles ajustes de cuentas. De ahí los indicios de violencia con los que han sido encontrados los cuerpos.
Solo en un caso, el de un hombre cuyo cuerpo estaba en avanzado estado de descomposición en La Resurrección en el mes de mayo, no se determinó la causa de la muerte.
En los otros 15 casos se concluyó que los decesos fueron provocados por balazos, golpes, asfixia o degollaciones, y gran parte de las víctimas fueron encontradas con pies y manos atados, con la cabeza envuelta (en bolsas de plástico, cobijas, etc.) y con señales de tortura.
Un joven y un niño entre los asesinados
De los cuerpos encontrados, dos casos estremecieron a Puebla. En el mes de mayo, fueron encontrados los cuerpos de Marco Antonio N. y de Alan Josué Bedolla, de 12 y 23 años de edad, ambos fueron brutalmente ultimados.
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Marco Antonio N., cuyo cuerpo fue encontrado en la Prolongación de la 14 Sur a la altura del Periférico Ecológico, fue degollado y su cuerpo fue arrojado en ese punto. Incluso sobre su asesinato, las autoridades señalaron que el niño se dedicaba al huachicol y fue calificado como un ‘halconcito’, hecho que fue desmentido por sus familiares.
Alan Josué Bedolla, era estudiante de enfermería y murió decapitado, la cabeza fue arrojada en la unidad habitacional de San Bartolo y el resto de su cuerpo fue encontrado días después en la autopista que conduce a Atlixco. También este cruel asesinato fue justificado por un presunto ajuste de cuentas.
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Foto: @Danherc
