Los temblores provocados por el nacimiento de un socavón en la junta auxiliar de Santa María Zacatepec municipio de Juan C. Bonilla ya dejaron daños en al menos 12 viviendas ubicadas cerca del lugar.
Algunos de los afectados han dejado sus empleos para montar guardias en sus casas e incluso ya prepararon sus maletas para salir corriendo en caso de que el hundimiento los alcance.
En un recorrido realizado la tarde de este miércoles por MTP Noticias, dos de los afectados relataron que desde el sábado comenzaron a sentir pequeños sismos y se percataron de que en sus casas aparecieron pequeñas grietas y cuarteaduras.
Adolfo Pérez, comentó que el lunes se dio cuenta que su vivienda presentaba grietas, las cuales atribuye al fenómeno natural que se ubica a unos metros de su propiedad.
“Presté más atención en mis vecinos (Magdalena y Heriberto) que en mi casa. El lunes me di cuenta de que ya tiene grietas la casa y hasta el lavadero se partió. Y pues esas no estaban antes, porque recién pinté de rosa y no estaban esas grietas ahí”, narró.
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Es tal el temor que ha provocado la aparición de estos daños, que la esposa de su papá abandonó la casa para refugiarse con unos familiares, por miedo a que la propiedad se desplome.
El hombre de 21 años de edad dejó de trabajar con el ingeniero que lo ocupaba, pues tiene miedo de que su casa se desplome y que nadie responda por los daños.
Por ahora la casa solo la ocupan su padre, su hermano y él. Sin embargo, la tarde del martes su padre tuvo un accidente y está hospitalizado y lo cuida su hermano. Por lo que Adolfo es quien está montando las guardias.
Recordó que durante la pandemia se había quedado sin empleo y recientemente se volvió a ocupar con un ingeniero en obras públicas, pero no ha ido a trabajar esta semana, por miedo a que en su ausencia la casa se dañe más y no haya nadie.
Adolfo se sienta en la esquina de su casa, una vivienda de color rosa de una planta. Observa por horas la llegada de reporteros locales, nacionales, uniformados y especialistas.
Maura Sandoval una mujer que tiene su vivienda a escasos 500 metros del socavón, aseguró que se ha dado a la tarea de buscar a sus vecinos para contabilizar los daños que han presentado sus hogares.
A decir de esta mujer son 12 casas las que presentan agrietamientos y cuarteaduras menores, que temen que se hagan más profundas con el incremento del diámetro del socavón.
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Ambos piden a Protección Civil Estatal, que haga inspecciones en sus casas y que les informen si se encuentran seguros o si hay peligro en seguir habitando sus casas.
Piden que haya garantía de que los van a apoyar si llegan a perder sus hogares, pues desde el sábado viven con miedo y no pueden dormir. Incluso ya hicieron sus maletas y prepararon sus documentos, para poder salir si es necesario.
“Yo preparé mis papeles, principalmente mis documentos y algunas cosas que es lo más importante. Porque al final de cuentas las cosas materiales van y vienen, pero nos preocupa a dónde vamos a ir a vivir”, expresó Maura.
Su casa es habitada desde hace 15 años por ella, su esposo y otras tres familias encabezadas por sus hijos y sus nueras. El terreno donde viven lo compraron hace 30 años y les llevó 15 años terminarlo de pagar y acabar de construir su casa.
“Mi esposo ya ni va a trabajar, porque tiene miedo de que pase algo más en la casa y a nosotros. Dice que qué vamos a hacer si el se va y esto se derrumba, cómo nos vamos a ir y sacar a mis nietecitas, una de ellas tiene nueve meses”, contó.
