Al menos ocho actividades entre misas, partidos fútbol, fiestas, actividades comerciales y caminatas suspendieron empleados de Protección Civil y Secretaría de Gobernación Municipal durante el fin de semana en la ciudad de Puebla.
Esto debido a la desobediencia social, puesto que la gente abandonó el confinamiento a pesar de que Puebla está en el semáforo rojo en contagios por Coronavirus, pues salieron los lugares públicos como fue en el Paseo Bravo donde se concentró un gran número de personas.
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Personal del ayuntamiento de Puebla hizo recorridos por distintas colonias de la capital, para invitar a la población a mantener el confinamiento en sus hogares; sin embargo, los poblanos poco caso han hechos a las recomendaciones sanitarias a pesar de que tanto la entidad como la capital se encuentran en ‘Riesgo Máximo’ por la pandemia.
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Entre el domingo y el sábado recorrieron la colonia Leobardo Coca, en donde invitaron el cierre de comercios en las calles, además de clausurar un torneo de futbol que se realizaba en unas canchas ubicadas entre la calle Ignacio Zaragoza y la Avenida Margaritas.
En Loma Bella se exhortó a los ciudadanos a suspender una misa, esto luego de que el templo de la colonia fue reabierto y la gente comenzaba a entrar.
Asimismo, se presentaron en colonias al norte y sur de la capital, en donde verificaron que las canchas de San Jerónimo Caleras y de la Unidad San Bartolo permanecieran cerradas por la contingencia.
El caso más escandaloso se dio en pleno Paseo Pravo, en donde con el uso de altavoces se invitó a la ciudadanía a retirarse, debido a la alta presencia de personas en la zona, en donde se pudo constatar que los poblanos continúan saliendo a la calle sin usar cubrebocas ni respetar la sana distancia.
Este domingo, las autoridades municipales acudieron a distintas juntas auxiliares para inhibir la aglomeración de personas, cancelando eventos deportivos en las colonias Satélite, Leobrado Coca y La Margarita.
Por otra parte, un grupo de funcionarios acudieron a Plaza Dorada en donde se recomendó el cierre de comercios no esenciales, sin llegar a la clausura de los mismos.