Una joven de 15 años huyó de su suegro, quien intentó violarla en Cochoapa, en el estado de Guerrero; sin embargo, la Policía la detuvo a ella.
La víctima, identificada como Angélica, fue obligada a casarse cuando tenía 11 años con un individuo llamado Rafael Julián, en la comunidad de Joya Real.
Meses después, el señalado se fue a trabajar a Estados Unidos. En ese momento, su suegro comenzó a acosarla.
Angélica se escapó luego de que el individuo intentara violarla en cuatro ocasiones. Sin embargo, cuando el caso llegó ante las autoridades, estas decidieron castigarla a ella.
La joven se refugió en casa de una tía, en la comunidad Dos Ríos, tras escapar de su violador. Sin embargo, el 29 de septiembre la Policía comunitaria llegó al hogar.
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Los uniformados llevaron a Angélica junto con su abuela, de 70 años, y sus tres hermanas, una de 8 años y dos de 6.
A la joven le advirtieron que no podría quedar en libertad si no devolvía lo que la familia de su esposo pagó por ella.
Algunos medios afirman la cifra era de 120 mil pesos más intereses. De acuerdo con El Universal, el monto se había elevado ya a 210 mil pesos, o sea, el doble.
El caso de Angélica se supo el 9 de octubre, cuando su madre Concepción lo denunció en el municipio de Ometepec, en la Costa Chica.
La mujer relató que llegó a la Comisaría con alimentos para sus tres hijas. Sin embargo, los policías discutieron con ella y uno la golpeó sin importarle que estuviera embarazada.
Tras la agresión, Concepción comenzó a desangrarse en el pasillo de la dependencia. Posteriormente, perdió a los trillizos que estaba esperando.
Liberan a menor con la intervención de Derechos Humanos
El caso llegó ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos y la Secretaría de Asuntos Indígenas y Afromexicanos.
Funcionarios de ambas dependencias se trasladaron a Dos Ríos para exigir la liberación de las cuatro menores de edad.
La comisión informó más tarde que las menores fueron resguardadas por las autoridades. Por ello, ahora se encuentran lejos del agresor.
Sin embargo, Neil Arias, abogada del Centro de Defensa de los Derechos Humanos de la Montaña, dijo que casos de este tipo son comunes en esa zona.
De hecho, ha documentado casos en los que la venta de niñas en la Montaña no solo es recurrente. También es tolerada por las autoridades locales.
En al menos otras dos ocasiones, las niñas se negaron a contraer matrimonio y decidieron terminar el acuerdo.
Sin embargo, las autoridades intervinieron a favor de la familia que pagó por las menores de edad.
Por @MTPNoticias
Crédito: Distritt