Al grito de “¡Juan de Dios vive, la lucha sigue y sigue!”, familiares y amigos de Juan de Dios Núñez Barojas, hijo de María Luisa, fundadora del Colectivo la Voz de los Desaparecidos, fue enterrado en su natal Tehuitzo, municipio de Palmar de Bravo, en la zona conocida como el triángulo rojo.
En la misma comunidad a donde se disponía llegar la noche de aquel 28 de abril de 2017, cuando iba acompañado de sus primos políticos.
Lee: Juan de Dios, hijo de fundadora de Voz de los Desaparecidos regresa a casa, pero muerto (VIDEO)
Abraham y Vicente Basurto, Juan de Dios volvió, pero en esta ocasión, en un ataúd de madera.
#DolorYSangre ?| Entre lágrimas y música norteña, así fue el entierro de Juan de Dios, hijo de María Luisa, fundadora de @VozdelosDesapa , quien llevaba 5 años buscándolo. pic.twitter.com/6OymMqfZxz
— MTP Noticias (@MTPNoticias) February 20, 2022
Tras ser velado durante todo el sábado y la madrugada de este domingo 20 de febrero, al medio día, se le realizó una misa de cuerpo presente para después ser llevado al panteón.
En todo momento, ahí estuvo su madre María Luisa, la misma mujer que luchó durante cuatro años y 11 meses para encontrarlo, aunque no haya sido vivo como ella anhelaba.
María Luisa marchó cada 10 de mayo porque no podía festejar sin su Juan de Dios, y ubicó el “Árbol de la Esperanza” en el Zócalo, en memoria de otras personas desaparecidas.
Entre lágrimas y con una playera con la imagen de su hijo, María Luisa dijo en breve entrevista que el colectivo que ella fundó, seguirá acompañando a otras madres en la búsqueda de sus hijos.
“¿Qué sigue?, sigue todo con más fuerza, el colectivo sigue, la lucha sigue, buscar a los demás y a todos los que nos faltan eso sigue”, dijo.
Entre lágrimas y música norteña despiden a Juan de Dios
A Juan de Dios le gustaba la música norteña como a casi todos los del pueblo. Hoy, en su despedida, sus amigos no solo le lloraron sino también le cantaron ‘El amigo que se fue’ de Intocable.
Reunidos en su ataúd, quienes convivieron con él, le dedicaron algunas palabras y aplausos.
Ya durante el camino, rumbo al panteón, vitorearon de manera unánime “¡Juan de Dios vive, la lucha sigue y sigue!”.
Esa lucha que seguirá su mamá María Luisa, desde el colectivo que fundó para acoger a familiares de otras víctimas.
Este fin de semana también fueron enterrados los hermanos Abraham y Vicente Basurto, quienes desaparecieron esa noche con Juan de Dios cuando se dirigían a la comunidad en donde este domingo fueron sepultados.
Por Manuel Cuéllar / @Manu_Cuellar10
