Un grupo de habitantes acordó apoyar, con el pago de abogados, al sacerdote Álvaro Aca, quien está asignado a la parroquia de San Francisco Ocotlán, junta auxiliar del municipio de Coronango, Puebla.
Tras el testimonio de una monaguilla menor de edad, que lo acusó de tocarla de manera morbosa e intentó violarla, los feligreses salieron en defensa del cura y la calificaron a ella como una ‘chismosa’.
Las encargadas de la iglesia y algunos fiscales del pueblo convocaron a una asamblea, la tarde de este 27 de noviembre, para discutir las notas periodísticas relacionadas con el ‘enviado de Dios’.
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Los habitantes, que participaron en la reunión, expresaron que el sacerdote sería incapaz de abusar sexualmente de una menor de edad.
En votación mayoritaria acordaron estar preparados por si la menor y su familia denuncian al cura, decidiendo apoyarlo económicamente con un abogado, para que el sacerdote no acabe en la cárcel.
La menor, de quien se ha omitido su nombre, relató que en la casa de un familiar, cuando estaba sola con el señor de la sotana, éste le acarició las piernas y quiso violarla.
Ella salió corriendo del cuarto y afortunadamente en ese momento iba llegando su familiar.
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En su testimonio, la adolescente afirmó que el eclesiástico las prefiere niñas, en el caso de los monaguillos. Sospecha que la misma persona ha intentado abusar de otras menores.
No es la primera vez que hay señalamientos en contra de Álvaro, hace unos meses feligreses lo tacharon de misógino, por llamar ‘rameras’ a las mujeres que usan vestidos pegados, escotes o minifaldas.
Por @MTPNoticias