Aunque la ola de feminicidios en Puebla no ha dado tregua, el delito disminuyó en un 12 por ciento de enero a octubre de este 2020 al registrar 44 carpetas de investigación, en comparación con las 50 que se abrieron en el mismo periodo del año pasado, de acuerdo con la última actualización del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Sesnsp).
Tan solo durante este fin de semana fueron enterradas Susana Cerón y Claudia Cecilia, víctimas de feminicidio, un delito que es penado hasta con 70 años de cárcel en la entidad.
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Así como ellas, muchas otras mujeres han sido asesinadas por razón de género en la entidad, a pesar de que existe una Alerta de Violencia de Género en 50 municipios del estado, decretado por la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (Conavim).
Cuatro feminicidios al mes en Puebla, en promedio
De acuerdo a los datos del Sesnsp publicados este fin de semana, a nivel nacional se han investigado un total de 705 asesinatos de mujeres que cumplen con las características de ser feminicidios.
Entre estas destaca que la víctima fue atacada por su pareja sentimental; que haya sido violentada o torturada; su cuerpo haya sido expuesto o que anteriormente haya recibido amenazas.
Si bien todos los asesinatos de mujeres en el estado deben ser investigados bajo el protocolo de feminicidio, la Fiscalía General del Estado (FGE), solo relacionó 44 casos, número que ubicó a Puebla dentro del top ten de estados con un mayor número de casos.
Por encima de Puebla se ubicaron el Estado de México con 119 casos; Veracruz, al registrar 71; seguido por la Ciudad de México con 61; Nuevo León, 57 y Jalisco con 47 casos.
Estrangulamiento, el método más recurrente de los feminicidas
De acuerdo a las características por el tipo de arma con el que se consumaron los 44 feminicidios en Puebla durante estos 10 meses del 2020, se identificó que los ‘verdugos’ de estas mujeres usaron objetos que tuvieron al alcance o sus propias manos para matar a sus víctimas.
De los 44 casos registrados antes las autoridades, 25 se cometieron con un elemento no especificado; 12 casos más con arma de fuego y siete con arma blanca, por lo que en estos dos últimos rubros existió una planeación para cometerlos, pues los agresores llevaban consigo estas armas, en la mayoría de las ocasiones.