En una situación crítica se encuentra el municipio de Acatlán, Puebla, gobernado por el edil panista Arturo Cajica Gómez, pues la incidencia delictiva del fuero común creció 27.1 por ciento durante el primer trimestre de 2022 en comparación con el mismo periodo de 2021.
Este municipio ubicado en la Mixteca de Puebla, en límites con Oaxaca, se quedó sin su director de la Policía Municipal, Héctor García Álvarez, pues él y su esposa fueron asesinados a balazos, mientras que sus hijos resultaron heridos durante una emboscada este 22 de abril.
Según datos publicados por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) en este municipio de casi 38 mil habitantes –de acuerdo al último censo del INEGI- en los primeros tres meses del año pasado fueron denunciados 70 delitos entre homicidios, robos, lesiones, narcomenudeo ante la Fiscalía General del Estado de Puebla.
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En el mismo periodo de 2022 se contabilizaron 89 denuncias, esto a pesar de que Arturo Cajica prometió en campaña el año pasado, mejorar las condiciones de seguridad en este municipio.
Acatlán cuenta con antecedentes de barbarie, pues en agosto de 2018 fueron linchados Ricardo Flores y Alberto Flores, tío y sobrino, al ser confundidos con ladrones. Por esos hechos, siguen seis personas en la cárcel.
Cajica fue postulado e impulsado por la exdirigente estatal del PAN, Genoveva Huerta, quien hizo campaña a su favor en este municipio.
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El alcalde no ha fijado una postura sobre el asesinato del director de Policía y de su esposa Guadalupe Campos, quienes fueron asesinados a balazos en el tramo de Piaxtla, en la carretera que comunica con la zona conocida como Las Palomas; las víctimas fueron sepultadas este domingo por amigos y familiares en dicho municipio.
De los delitos denunciados en el primer trimestre de este 2022, están:
- Un homicidio doloso.
- 8 lesiones.
- Un delito sexual.
- 15 robos con violencia y sin violencia
- 14 delitos contra la familia.
- 26 delitos de amenazas.
El otro homicidio doloso reciente es el de Guadalupe de 46 años de edad, vidente y santera, quien fue asesinada al interior de su domicilio ubicado en el barrio de San Juan en Acatlán de Osorio, Puebla, el pasado 15 de marzo.
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La mujer de complexión robusta, morena y adoradora de San Judas Tadeo, era muy conocida en la zona, fue encontrada al interior de una vivienda ubicada en la calle La Mina.
Tras dar parte a los números de emergencias, la Policía Municipal acordonó la vivienda y posteriormente Agentes de Investigación de la Fiscalía General del Estado (FGE) realizaron las diligencias y el levantamiento del cadáver.