(Primera de dos partes)
Solo unos días pasaron de aquel 29 de junio de 2015 cuando fue inaugurado por el ex gobernador Rafael Moreno Valle, para que el Centro de Salud con Servicios Ampliados (CESSA) de Esperanza, Puebla, fuera usado como guarida de huachicoleros.
El nosocomio, que costó 32.4 millones de pesos, además de atender a pacientes y a habitantes de la región, fue usado para embodegar bidones con gasolina robada, al ubicarse en un punto estratégico del Triángulo Rojo y en los límites con Veracruz.
Te puede interesar: El morenovallista Facundo Rosas será investigado por nexos con huachicoleros: Barbosa
Fue hasta los tiempos de Antonio Gali Fayad como gobernador, entre los años 2017 y 2018, cuando galenos entregaron una veintena de oficios a las autoridades, de los cuales posee copia MTPNoticias, para denunciar que continuaba la operación de los chupaductos en la clínica, solo que en esa administración no hubo investigaciones, ni detenidos.
Coludidos una red de funcionarios al mando de Arely Sánchez
En los hechos delictivos se vieron implicados una red de funcionarios públicos de la Secretaría de Salud, quien en esos años fungía como titular Arely Sánchez. Los nombres de los involucrados aparecen en los oficios, quienes omitieron las quejas de los médicos.
La principal señalada fue Adriana Tobón, quien fungía como directora del CESSA de Esperanza, acusada no solo de dar el acceso a los huachicoleros, sino de cargar su camioneta con bidones de gasolina robada y de emprender un hostigamiento laboral contra los cirujanos que denunciaron los hechos.
En un oficio dirigido a Alejandro Meneses Fernández, ex director de Operación de personal de los Servicios de Salud, sellado de recibido el 7 de junio de 2017, un médico le solicito su cambio de adscripción, esto debido a que meses atrás recibió amenazas constantes:
“…debido a que hace un año se estaba guardando huachicol en las bodegas del CESSA de Esperanza cuando se encontraba como directora del CESSA la doctora Adriana Tobón, misma que estaba al tanto de dicho ilícito y debido a que me había percatado que se sacaba de las bodegas garrafas con huachicol, inició un periodo de acoso laboral por parte de la doctora antes mencionada…”
En el mismo oficio se especifica que reportó a coordinadores de la jurisdicción del sector salud y del nosocomio, sus jefes inmediatos, quienes omitieron un primer reporte de lo que estaba sucediendo, algunos de ellos la ex coordinadora de dicho nosocomio Gabriela Pérez Palacios, el doctor Eduardo Rojas Larios y la jefa de Jurisdicción Judith Garcilazo Alcántara.
“Finalmente me dirigí con el secretario de la sección XXV, el doctor Jesús Manuel Rivera Vázquez, quien me sugirió presentar una denuncia para frenar el robo de combustible, pero informándome que tampoco podía hacer nada por mí, ya que esto es un delito federal y no le compete a él como representante del sindicato”.
“Ya no andes de hocicón o te va a cargar la chingada hijo de ##$%%, posteriormente las llamadas fueron para amenazarme diciendo que a mi familia y a mí nos iba a cargar la “#$%”, comentó en el mismo documento el médico que encabezó a sus compañeros para denunciar que los huachicoleros entraban y salían a cualquier hora.
En otras cartas selladas de recibido también aparecen los nombres de Rafael Morales Vargas, ex subdirector de Recursos Humanos de los Servicios de Salud del Estado y José Galván Centeno, ex coordinador estatal de Estomatología, quienes fueron enterados y eludieron la problemática.
Fotografiaron a ex directora de CESSA en su faceta como médica ‘huachicolera’
En un oficio fechado el 30 de abril de 2018, entregado al entonces jefe de Jurisdicción sanitaria número 4 con sede en San Salvador El Seco, Eduardo Rojas Larios, le notificaron que la entonces directora Adriana Tobón fue sorprendida guardando huachicol en las bodegas del CESSA de Esperanza
En la misiva se incluyó la fotografía con la que documentó la parte acusadora a su jefa en el CESSA de Esperanza. Solo que aquel servidor público también omitió el tema.
81 empleados firmaron para denunciar lo que ocurría en el CESSA
En otra misiva, esta con fecha de 22 de marzo de 2017, entregada a Jesús Manuel Rivera Vázquez, secretario de la sección XXV del SNTSA, un total de 81 empleados también denunciaron nepotismo, mala atención y abuso de autoridad por parte de sus coordinadores de la jurisdicción, Jesús Eduardo Rojas Larios y Nancy Lizeth Chazari.
Los firmantes exigían la remoción de sus compañeros, petición que nunca fue escuchada ni por su líder sindical ni por el delegado jurisdicción 4, Erick López Bautista.
Una constante las balaceras y cadáveres arrojados en las puertas del CESSA
Los hechos violentos fueron una constante, en una misiva a Jesús Manuel Rivera se le dio a conocer que el 4 de septiembre de 2017, a las 4:45 hora, ingresaron siete individuos altamente armados y encapuchados ingresando con lujo de violencia golpeando a dos vigilantes, para preguntar si estaban escondiendo personas heridas.
El 27 de julio del mismo año, a las 13:30 horas, una promotora del hospital fue perseguida por varias cuadras de Esperanza por hombres en diferentes camionetas.
El 8 de agosto también de 2017, se escucharon detonaciones de armas de fuego y persecución en autos atrás del CESSA de Esperanza.