El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, justificó a los curas pederastas, pues dijo que hay más violaciones sexuales en las familias contra menores de edad que en las iglesias por parte de los sacerdotes, luego de que fuera cuestionado su opinión sobre el informe de los Legionarios de Cristo al reconocer 173 casos de pederastia, de los cuales, 60 fueron cometidos por Marcial Maciel.
“Estamos haciendo un esfuerzo por denunciar estos hechos cuando se presentan. Sí quiero decirles que son casos muy dolorosos, muy tristes, pero que aún así son mínimos en comparación con todos los casos de abusos en otros sectores, en las familias”, dijo en entrevista al término de su tradicional misa dominical en la Catedral de Puebla.
Aseguró que tanto los obispos como arzobispos tienen la orden de no encubrir a nadie y denunciar. “La exigencia del santo padre me parece muy buena, la exigencia con nosotros mismos, con los obispos, para que afrontemos y la iglesia católica es la única que está afrontando esta situación con responsabilidad”, aseguró.
Al ser interrogado sobre el caso reciente que se dio en Puebla, entorno al padre Álvaro de San Francisco Ocotlán, en el municipio de Coronango que fue acusado de intentar violar a una menor de edad aprovechando cercanía con ella debido a que formaba parte de los acólitos, Sánchez Espinosa únicamente dijo que el caso ya está en manos de la Fiscalía General del Estado.
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Recordó que él mismo pidió separar al sacerdote de sus actividades religiosas y que no fue asignado en ningún otro lugar hasta que terminen las investigaciones.
Este fin de semana se publicó un reporte de la Congregación de los Legionarios de Cristo, en el que reconoce que 175 menores de edad fueron violados por de 33 sacerdotes desde 1941.
Por Griss Moreno