La familia Bravo denunció que Arturo Soto Martínez, candidato del PRI a la presidencia municipal de Rafael Lara Grajales, se apoderó ilegalmente de su terreno y otras 20 personas también han manifestado que la familia Soto Martínez los han despojado de sus propiedades.
En entrevista con MTPNoticias, Mayra Bravo, hija del propietario del terreno, exigió a las autoridades a ser imparciales, ya que todo fue comprado de manera legal y que apoyen a todos los afectados por el abuso de autoridad, el despojo de predios y tráfico de influencias por parte de Arturo Soto Martínez y su familia.
“No hemos encontrado el apoyo por parte del gobierno y ahora Arturo Soto quiere ser presidente municipal para seguir haciendo lo mismo, es injusto”, destacó la entrevistada.
Lee: Hijos de políticos del PRI van en planilla de Eduardo Rivera en la capital poblana
Durante 8 años les han mostrado las escrituras de su terreno a la familia Soto Martínez sin éxito
En 2013, el señor David B. de Lara Grajales compró, con mucho esfuerzo, un terreno de 300 metros cuadrados por la cantidad de 300 mil pesos, pero después de liquidarlo e intentar tomar posesión y cercarlo, los vecinos le llamaron a la familia Soto Martínez, quienes llegaron con góndolas de tráiler y camiones de volteo -ya que se dedican a hacer viajes de tierra- para intimidarlos y no dejarlos pasar nuevamente.
Al acercarse con los que bajaron de esas góndolas, siendo todos sus trabajadores del sindicato de la Confederación de Trabajadores de México, pues Leobardo Soto es líder estatal de la CTM y mostrarle a Miguel Soto las escrituras, estos se negaron sin explicación y los intimidaron con prepotencia, al ser muchos contra dos personas, la familia Bravo decidió retirarse en calma.
“Arturo Soto y su familia son los que si ven obras en Grajales llegan con el dueño a pedirle cuotas sindicales, en caso de que no lo hagan, les anulan la obra. Él vive de las cuotas sindicales de trabajadores, albañiles y obreros”, agregó Mayra.
Al creer que la familia Soto tenía algo en contra de la familia Bravo, estos últimos decidieron vender en 2017 la propiedad y al ser liquidado los nuevos compradores decidieron poner bardas, pero nuevamente Miguel Soto se hizo presente con muchos de sus trabajadores para intimidarlo, hasta que lograron sacarlos, por lo que tuvieron que devolverle el dinero a sus clientes, pues tampoco los dejaron en paz.
Ante la situación, Mayra Bravo habló personalmente con Miguel Soto, quien le mostró un “papel escrito a computadora” argumentando que ese terreno es una herencia de su papá, pero no llegaron a nada e incluso la bloqueó por WhatsApp y de llamadas para evitar ser contactado.
Por esta razón, el señor que les vendió el terreno, les otorgó un poder de pleitos y cobranzas notariado para pelear la propiedad. Con todas las evidencias en mano, hace un mes Mayra intentó hablar con el candidato Arturo Soto, ya que es la albacea de la familia Soto y le dijo “estoy consiente del terreno y ese problema, pero lo vamos a arreglar después de la campaña”.
Creyendo en su palabra, la familia Bravo esperó, hasta que hoy en día ya instalaron sus tráileres, montones de arena, graba y sus camiones.
Pese a tener la escritura, así los han tenido durante ocho años, pues no quieren dialogar para arreglar las cosas y piensan que no quieren hacerlo porque el terreno ya está totalmente ocupado por parte de ellos.
Más de 20 personas denuncian haber sido víctimas de la familia del candidato del PRI
Mayra Bravo dijo que al comentar esto con vecinos del municipio Rafael Lara Grajales, más de 20 personas han comenzado a denunciar que también han sido despojados de sus terrenos a manos del candidato del PRI a la presidencia, Arturo Soto Martínez.
Mayra contó que uno de esos casos es que Arturo Soto le entregó un terreno a su amigo Bernardo Mora, ya que los dueños de la propiedad fueron engañados por el candidato del PRI, quien les pidió las escrituras “para arreglar” la situación; sin embargo, con esos papeles le sacó escrituras a su amigo Bernardo en Tehuacán con un notario quien le hace este tipo de “favores”.
“La persona afectada no quiere denunciar ni hablar porque es un adulta mayor de 80 años enferma”, detalló Mayra.
Además, otra señora fue despojada por su terreno, ya que a la familia Soto le interesaba su ubicación a lado de la carretera, pero aún no tienen respuesta del mismo, “solo se lo adueñaron”.
Ella considera que este modo de operar por parte de la familia Soto Martínez ha sido porque se han asesorado de la toma de posesión para que nadie los saque de esos terrenos, aparte de la avaricia que los habitantes han notado, ya que lo han demostrado hasta en el panteón de Grajales, donde lo bandearon y le pintaron las siglas CTM para que las personas no puedan pasar más.
“Quieren que todo sea de ellos, en el sindicato de la CTM, pusieron un altar con una escultura de cuerpo completo de su papá y cada que se acerca la fecha en la que falleció, echan pirotecnia, hacen comida y es porque quieren que los veneremos”, finalizó.
