Desde el año 2012 se adiciono a la Ley Federal del Trabajo la licencia por paternidad prevista en el artículo 132, fracción XXVII Bis misma que fue reformada en 2018 y establece la obligación del patrón de otorgar una licencia de paternidad de cinco días laborables con goce de sueldo a los hombres que trabajan al momento de que nace su hijo y de igual manera en el caso de adopción.
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El artículo mencionado protege la maternidad y la paternidad como derecho humano, que promueven la igualdad de género y la salud materno-infantil, así como un reconocimiento jurídico y social de las funciones productivas y reproductivas de las personas.
La Unicef en estudio sobre maternidad y paternidad en el lugar de trabajo en América Latina y el Caribe refiere que el permiso remunerado por paternidad ayuda a que los padres puedan establecer vínculos con sus hijos e hijas, contribuye al desarrollo saludable de los lactantes y los niños, además de reducir la depresión materna y cerrar la brecha de la igualdad de género.
Por lo tanto, el Estado debe garantizar la protección de lo anterior a tráves de las Licencias (definidas como permisos de ausencia en el medio laboral) de maternidad, paternidad y parentales así como políticas de apoyo a la lactancia; lo anterior por que en México solo se ha restingido a un periodo muy corto en el caso de padres a diferencia de países europeos donde el periodo se amplía, por ello es importante el anuncio que refirió el Ministro Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación siendo lo siguiente:
“Por 1ª vez en la historia daremos licencias de paternidad por 3 meses pagados igual que las de las mujeres. Es una medida transformadora para terminar con el estereotipo de la mujer cuidadora, con la discriminación laboral y romper la brecha salarial.”
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Al ser nuestro máximo tribunal quien refiera la licencia por paternidad por periodo más extenso del que retoma nuestra Constitución deja un precedente importante y de ejemplo para que otras instituciones públicas y privadas avancen en esta agenda de igualdad y sea implementada en el área de trabajo, sin soslayar que lo ideal sería dejarlo plasmado en la Ley Federal del Trabajo para que pueda ajustarse el marco normativo y con ello generar certeza jurídica.
¡La licencia por paternidad no debe ser olvidada sino garantizada!
Por Keren Reyes / @keren_kelly
