Se contagió por su mejor amiga. Tiene dos semanas que la vio por última vez y desde entonces está en cuarentena. Aislada.
Mizraim Lemus es una de las 209 personas contagiadas por Covid-19 en el estado de Puebla, que al corte del 9 de abril registra 23 fallecimientos, aunque el Gobierno Federal muestra menos en su estadística diaria.
Es dentista y estudió 2 años en España, en la Universidad de Oviedo, tiene varios amigos españoles e italianos. La epidemia en varios lados la vive de lejos, pero nunca pensó que ella sufriría de primera mano los síntomas del virus que ha ocasionado más de 91 mil muertes en el mundo.
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En los primeros días de enero se enteró a través de las noticias del brote anunciado en Wuhan, China y de su propagación. A pesar de eso, antes de la crisis no tomaba en serio la gravedad del virus -con la mayoría de las personas en el país ocurre lo mismo- intuye.
Al no ser un caso de gravedad se ha mantenido en observación desde su casa, su amiga es epidemióloga y pidió para ella la gracia del anonimato, pues aún contagiada continuó trabajando y atendiendo casos, ya que no hay personal suficiente. Hace quince días se reunieron como siempre y tomaron una copa, hablaban del tema de moda; ambas formarían parte de los primeros casos registrados en la entidad.
-Estoy en la estadística, y a pesar de no pertenecer a un sector vulnerable, formo parte de las personas con este virus. No he salido para nada de mi casa y he mantenido la cuarentena total, creo -argumenta- depende de la edad de la persona y de su estado de salud actual. Había apenas 400 pacientes y en ese lapso yo aparecí como un caso confirmado-.
-Estoy casi segura que en un futuro el virus será algo estacional -señala-, este clima nos ayudará a superar de a poco la situación-.
Trabaja en dos consultorios dentales de manera independiente, uno en Cholula y otro en Tetela de Ocampo, donde vive con sus abuelos. Decidió hace tiempo no irse a los Estados Unidos con sus padres que viven en Chicago, para atender su emprendimiento personal y no dejar solos a sus seres más queridos.
Trata de mantenerse positiva; sin embargo, reconoce en ella los ataques de ansiedad, esteriliza todo con sus herramientas médicas, tiene platos, vasos y utensilios de cocina solo para ella; su mamá y su hermano lograron viajar antes del cierre de la frontera. Están con ella, aunque no la ven, aunque preparan comida que no comparten en la mesa y tratan de ayudarle a pasar de mejor manera su soledad que comparte y hace menos a través de redes sociales.
¿Cuándo te enteraste del virus?
– A través de las noticias, pero fue cuando llegó el virus a Italia y a España que tomé en consideración las cosas.
– Uno de los primeros casos confirmados en Puebla fue el de un alemán que acudió a Puebla a brindar un curso, fue hospitalizado en el Hospital Betania, y ahí fue mi primer foco rojo, uno de los tíos de mis amigas se encontraba ahí, y nosotros fuimos a verlos… la paranoia se apoderó de mi, y fue así como comencé a investigar y a tener información sobre lo que ocurría. En el hospital, todos entraron en pánico, hicieron preguntas y nosotros estuvimos ahí. Lo que decidí fue resguardarme, no quise arriesgar a mis abuelos y preferí quedarme en Puebla-.
– Para qué me arriesgo. La gente no sigue las recomendaciones, muchos no han seguido las recomendaciones y preferí quedarme acá, al final a pesar de la paranoia, tuve la razón…
No es algo que presentí, no imaginé que me fuera a enfermar, sabía de la situación, estuve en un hospital cercano a uno de los primeros casos, y tuve contacto con mi amiga que atiende situaciones relacionadas con estos casos, pero no pensé en que estaría contagiada, no pensé en estar enferma, en ser portadora, o en formar parte de una estadística… no creí que me fuera a infectar -.
Luego de eso se tomó un tiempo para ajustar sus consultas, que terminó por cancelar y darse un par de días para identificar si tenía algún síntoma, transcurrieron unos días hasta que se presentaron.
¿Cómo fueron los síntomas?
– Unos cuatro días después de ver a mi amiga, me desperté con un dolor de cabeza insoportable, con la garganta cerrada, ese día tenía planeado pagar una multa de tránsito, pero ya no logré salir, fue cuando recibí la llamada de mi amiga, ella me dijo que se había realizado la prueba y que había dado positivo, lo relacioné y entendí todo-.
– Presenté tos, una tos seca, como si tuviera la garganta llena de polvo, no quería hacer nada… algo raro, es diferente. El dolor de cabeza de a poco se fue, ya no me sentía tan mal… aún así me tomé la temperatura y tenía 38.3 (centígrados), luego llegué a 39.7. Dormí lo más que pude y tomé paracetamol para aliviar un poco los dolores… el lunes me sentí mejor y así he seguido, después de eso no he tenido otros malestares, que no sean los de la cuarentena y el encierro -.
Luego de confirmar el virus, recibió una llamada de seguridad por parte de las autoridades para mantener la cuarentena desde casa, le brindaron todas las instrucciones y medidas de seguridad mientras continúa bajo observación.
¿Cómo ha sido tu vida luego de ser confirmada con el virus?
– Sigo en cuarentena por prevención, no quisiera volver a enfermarme, hay muchas personas asintomáticas, por prevención prefiero no salir, no me arriesgo para nada. Mi cuarto está totalmente aislado de la casa, mi mamá y mi hermano se vinieron de Chicago para México. Las medidas de seguridad nos han permitido de alguna forma convivir. No puedo entrar a la cocina, me dejan servido y yo lo recojo… Tengo asignado un plato, un vaso, un juego de cubiertos, como sola y en el cuarto de servicio lavo y limpio lo que use-.
– Tengo desinfectantes de grado médico que regularmente uso en el consultorio…hoy lo ocupo para limpiar mi plato; Lo dejo un rato y luego los enjuago, mis cubiertos los esterilizo, los meto al autoclave y los esterilizo; mi mamá se encarga de darle de nuevo un lavado y se queda aparte de todo hasta que vuelvo a comer-.
Hasta ahora su mamá y su hermano no han presentado sintomatologías y eso le da un poco de tranquilidad, no obstante, en el transcurso de los días uno de ellos presentó algunos malestares de los cuales se recuperaron casi de inmediato. Para Mizraim cualquier tos le genera una sensación distinta.
¿Cuál es tu situación económica?
– No estoy trabajando, está parado ese asunto, a pesar de recibir varias llamadas estoy reagendando, espero para mayo pueda ver algunos pacientes, cuando termine esta contingencia, es cuando pienso en atenderlos, no quisiera infectar a alguien o de nuevo padecer y pasar por lo mismo -.
– Muchos compañeros están atendiendo sólo urgencias y bueno tendremos que aguantar, de momento mis padres me apoyan económicamente, aunque mis gastos no son muchos ante la inactividad. Yo espero también pronto atender pronto algunas urgencias, aunque más que eso quisiera contribuir a evitar los contagios-.
El estado ha emitido varios decretos para evitar la propagación del virus, desde la reducción de actividades sociales, económicas y comerciales, hasta el uso obligatorio de cubre bocas y llamados a las escuelas e instituciones privadas para solidarizarse con los padres de familia que continúan realizando pagos a pesar de la inactividad escolar.
Las perdidas económicas hasta el momento son incalculables para el estado, se pronostica una caída de 60 por ciento en las remesas de los migrantes de la entidad en EU por efecto de la pandemia; hasta el momento son 23 los poblanos que han perdido la vida en aquel país, según cifras del gobierno del estado que el próximo domingo 12 de abril presentará un plan para reactivar la economía.
Luisa María Alcalde, Secretaria del Trabajo federal, reveló que por la crisis económica en Puebla han despedido a 12 mil 26 personas, ubicando al estado como la séptima a nivel nacional con mayor “destrucción de empleos”.
A nivel nacional las situación es peor, según estimaciones de la oficina que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) tiene en México, nuestro país podría perder entre 1 millón 700 mil y 7 millones 400 mil puestos de trabajo debido al Covid-19, mientras que la ONU señala que podrían existir 25 millones de desempleados en el mundo.
-Mi mamá y mi papá me ayudan de momento y creo que todos de a poco saldremos de esta- añade al señalar que por cuestiones de trabajo su padre continúa en los Estados Unidos.
¿Qué opinas de las cifras oficiales?
– Creo que hay mucha gente que no está en estadística, que hay más casos de los registrados, que hay más gente infectada, que seguirán aumentando, que lo que se publica a diario es lo confirmado, pero creo que, si hay muchos más casos, no se puede tomar la temperatura ni realizar pruebas de casa en casa, México no tiene la capacidad para hacerlo… y no es cosa del presidente -, asegura.
– Es muy complicado, los esfuerzos son muchos, pero a veces insuficientes -.
Y tiene razón. Basada en un modelo denominado Vigilancia Centinela, el número de personas contagiadas con coronavirus Covid-19 en México podría ser de unas 26 mil 500 personas, informó de manera reciente el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell.
Con 209 casos confirmados en 21 municipios, esta última proyección ubicaría a Puebla con más de mil 860 casos.
Los memes y las tendencias en redes sociales le dan risa -el mexicano siempre sale adelante- dice, nos tomamos las cosas con humor, y hay gente a la que le molesta, pero la verdad es que eso me gusta, que a pesar de todo siempre tiene un motivo para sonreír, este sentido del humor, nos ha sacado adelante y de apoco la consciencia nos lleva a tomar acciones, asegura.
“Es una forma de desahogar la preocupación y lo que hoy es una tragedia es también una liberación de dopamina que nos hace sentir mejor, una cultura colectiva de la que somos parte y que nos dibuja una sonrisa”, agrega.
¿Cómo resumes lo que has pasado?
– Ansiedad, escepticismo, encierro, pero en general positivo-.
Tengo algunos problemas de ansiedad, y paranoia, que es quizá algo cada vez más común en mi comportamiento -explica-. Somos los más espantados, los que más cuidados queremos tener, mis papás al principio escépticos, luego ya no, mis abuelitos desde un inicio están encerrados… y es en general un poco raro, aún así trato de mantenerme positiva -.
– Entonces en resumen positivo, las cosas pasan por algo y esa es la actitud y el enfoque que quiero darle -, finaliza.
A pesar de las circunstancias para la dentista de 27 años, Mizraim Lemus, la vida retomará sus causes naturales, piensa en un futuro abrir otro consultorio, quizá consolidar una franquicia, vivir con su pareja y viajar de nuevo.
Se ve atendiendo a sus pacientes y siendo voluntaria en algún hospital. Piensa en los demás casos, en las personas que no pueden estar en cuarentena o que simplemente no siguen las recomendaciones, “en lo bueno y lo malo” (sic) de esas circunstancias, en la vida y la situación de todas esas personas en México que no esperaban pasar por esto. La cuarentena le ha permitido reflexionar y ver las cosas de una forma distinta.
Su historia y lo que ha vivido lo compartirá de nuevo con su perra Sofía, que la acompaña a todos lados y que no ha entrenado para sus competencias de frisbee, piensa también en un perro más y quiere regresar a entrenar de nuevo danza aérea, salir con sus amigos y dejar lo más pronto posible todo atrás.
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