Quien debe estar que no concilia el sueño es Jorge Aguilar Chedraui.
Y no es para menos.
Incluso, ya debe estar buscando un amparo o huyendo de Puebla.
La advertencia en su contra se ha hecho una y otra vez, desde abril para ser exactos, cuando inició la campaña de Miguel Barbosa por la gubernatura.
“La mayor corrupción está en los temas del área de salud. Hay médicos que se les paga y no llegan, medicamentos que se imprimen con cajas como si fueran de patentes y son similares, vamos a fincar responsabilidades”, declaró el hoy gobernador electo el 11 de dicho mes.
Después, dio más pistas: se construyeron Centros de Salud con Servicios Ampliados (CESSA) solo para hacer negocios.
Lee: Hay hospitales que no funcionan; se construyeron para obtener ganancias ilícitas: Barbosa
Si bien Barbosa no dio nombres, la mayoría de esos espacios se edificaron cuando Aguilar Chedraui fue secretario de Salud, en los primeros tres años del gobierno del fallecido exgobernador, Rafael Moreno Valle.
En enero del 2017, el periódico Cambio documentó que Aguilar Chedraui tejió una red de corrupción en complicidad con algunos exempleados como Gabriel González Cossío y Eduardo Letayf Acar para, junto con su primo Eduardo Torres Chedraui, desviar al menos 400 millones de pesos con la asignación directa de contratos a empresas fantasmas.
¿Será que el panista terminará en la cárcel por enriquecimiento ilícito tal como ocurrió con Alfredo Arango en el gobierno de Moreno Valle?
En julio del 2012, el entonces presidente de la Comisión Inspectora en el congreso local, el panista Mario Riestra Piña calificó como “histórica” las irregularidades encontradas a Alfredo Arango, un monto de 8 mil 464 millones 383 mil pesos.
¿A cuánto ascenderá el monto que se le encontrará a Aguilar Chedraui y a otros exfuncionarios morenovallistas que ya están en la mira?
Está cantado que el primero en la mira es Aguilar Chedraui.
También habrá que ver tus evaluaciones respecto a los escándalos de corrupcion en los que estás implicado.
— Gabriel Biestro (@Biestro) June 25, 2019
***
Otra de las áreas en donde ya se revisa cada esquina, con lupa, es en Puebla Comunicaciones. Barbosa ya adelantó un poco lo que Pedro Gómez está encontrando como trabajadores fantasmas, es decir, que cobran en el gobierno pero que no trabajan ahí sino en empresas de quienes han dirigido este organismo.
Sin embargo, esta es solo una pista de todas las anomalías que están hallando e incluso, la intensión es solicitar a la futura contralora, presentar una demanda penal ante la Fiscalía General del Estado.
