Charity Lee es la madre de un hijo que abusó sexualmente y asesinó brutalmente a su hermana menor, en un caso que conmocionó a Texas en Estados Unidos en 2007. Sin embargo, pese al salvaje ataque que Paris llevó a cabo contra su hermana Ella, de cuatro años, la madre reconoce que no tiene rabia contra su hijo y que lo perdona.

Su hijo tenía 13 años cuando ingresó a la habitación de su hermana pequeña mientras ella dormía para llevar a cabo el ataque sexual y el posterior asesinato. La menor fue encontrada con apuñaladas en su cuerpo y la brutal historia rápidamente se tomó la atención de las personas.

La madre de 46 años, relató su historia en un libro de memorias titulado “¿Cómo ahora, Mariposa?: Una memoria de un asesinato, sobrevivencia y transformación”.

Según detalló The Sun, el libro relata su historia y aborda el asesinato que conmocionó a Estados Unidos.

En el libro, además de entregar detalles del día en que ocurrieron los hechos, la madre reconoce que perdona a su hijo. Sus hijos estaban al cuidado de una niñera, pero el menor de 13 años se encargó de persuadirla para que se fuera de la casa.

Lee: Ginecólogo insemina a cientos de mujeres con su esperma

Luego de llevar a cabo el asesinato, Paris llamó por teléfono a uno de sus compañeros de escuela y pasó seis minutos hablando, antes de dar aviso de lo sucedido al 911. Cuando llegó el personal de emergencia, el menor fingió haber realizado ejercicios de reanimación.

Poco duró su actuación ya que terminó confesando el brutal crimen, además de reconocer que estaba planeando matar a su madre.

Al respecto, la mamá del autor del crimen relató:

“La primera razón por la que no siguió adelante y no me mató fue porque era mucho más difícil matar a alguien de lo que pensaba. Y la segunda razón fue darme cuenta de que si me hubiera matado, solo habría sufrido durante cinco, 10, 15 minutos. Pero, si me dejaba con vida (sin su hija), sufriría por el resto de mi vida”.

“MI HIJO ES UN PSICÓPATA”

Paris, quien actualmente tiene 27 años, fue condenado a 40 años de cárcel, el máximo por asesinato juvenil, en 2007. Actualmente permanece detenido en una cárcel de Texas donde su madre reconoce que lo visita regularmente.

“Mi hijo es un psicópata. No puedo ayudarlo. Puede que eso no importe a largo plazo. Lo que puede importar es que no puedo, no en este momento, renunciar a él tampoco y por eso debo perdonarlo”, relata la mujer.

“Yo siempre asumí mi responsabilidad, pero también estoy convencida de que una gran parte de lo que definió su personalidad es genético”, agregó.

En esa línea, señaló que “Amo a mi primogénito con tanta intensidad como desde el día que supe que estaba embarazada de él”.

Además, la mujer confesó que fue atacada por su hijo durante una visita y reconoció que si estuviera libre “le tendría miedo”.

“Creo que lloré constantemente durante meses. Perdí 15 kilos en 13 días. Empecé a tartamudear. La razón por la que me dejó vivir fue porque después de matar a Ella se dio cuenta de que yo sufriría por más tiempo si me dejaba viva”, concluyó.

Su libro termina en 2011 y ese año fundó la fundación ELLA -que significa Empatía, Amor, Lecciones y Acción-. La organización benéfica ayuda a las personas afectadas por la violencia, las enfermedades mentales y el sistema de justicia penal.

UNA NUEVA HIJA

En 2012 dio a luz a “una niña de 6 años feliz, cariñosa, inteligente, obstinada y obstinada” llamada Phoenix. Charity dice que es honesta con él sobre quién es su hermano y a veces incluso les permite hablar por teléfono.

“Me dicen que soy una madre horrible por permitir que el niño que asesinó a mi hijo hable con mi otra hija. Estoy dando un ejemplo a Phoenix. Un ejemplo de cómo se ven y se comportan el amor incondicional y el perdón”, declaró.

Crédito y foto:  el Zócalo 

Por: @MTPNoticias