Wrangler Hendrix, un niño de 8 años, murió al quedar atrapado entre la secadora y lavadora mientras jugaba a las escondidas con sus primos. El menor es originario de Jewett, Texas, y se encontraba visitando a sus abuelos en Georgia. El hecho sucedió la noche del viernes 10 de junio.
El incidente ocurrió en una casa ubicada en Murphy Road, a las afueras de Coolidge, en la que viven los abuelos de la víctima.
Las autoridades del condado Thomas indicaron que el niño se escondió detrás de los electrodomésticos cuando se quedó atrapado, según un reporte de WSB-TV “Después de unos cinco a diez minutos, la familia del niño lo descubrió y luego comenzó a realizar reanimación cardiopulm onar”, indica el reporte.
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Los socorristas informaron que el niño respondió brevemente a las labores de emergencia, pero luego volvió a dejar de respirar. Fue transportado a un hospital, donde murió.
El reporte indica que el niño no presentaba ningún traumatismo en el cuerpo cuando fue encontrado, por lo que se cree que murió por asfixia posicional.
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“Wrangler estaba en segundo grado y era hijo de Rhonda White y William Andrew Hendrix. Los arreglos funerarios se llevarán a cabo en Jewett, TX en Ricks-Bowers Funeral Home. Será enterrado en el cementerio de Sardis”, publicó la familia en un obiturario.
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Otras muertes asociadas a menores con electrodomésticos se han reportado en el pasado. En Houston, un niño de 10 años fue hallado sin vida en una secadora de ropa en abril del 2018. En ese incidente, el niño Fernando Hernández fue encontrado muerto en un cuarto de lavandería. La víctima jugaba a las escondidas con varios niños cuando ocurrió el incidente.
Crédito: Univisión
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