En Estados Unidos un perrito terapeuta recibió un doctorado por parte de la Universidad Virginia Tech por sus seis años de servicio a la institución.
Moose, un perrito labrador retriever de seis años de edad, recibió el grado de doctor luego de brindar seis años de servicio a la comunidad de la Universidad Virginia Tech, fungiendo como perrito de apoyo para alumnos que han presentado crisis de ansiedad, depresión y otras patologías mentales.
Además de este trabajo, Moose fue reconocido como uno de los cuatro animales de terapia y embajadores de la escuela para la concientización de la salud mental, por lo que su participación en los juegos de futbol y eventos de los clubes de la universidad también fueron recordadas con entusiasmo.
En la breve ceremonia de graduación se informó que Moose brindó más de 7,500 sesiones de asesoramiento a los alumnos, siendo siempre supervisado por Trent Davis, el consejero autorizado quien lo acompaña a trabajar.
Desde hace 10 años, Moose y Davis se encargan de llevar a cabo campañas de acompañamiento animal y terapias asistidas con el objetivo de ayudar a los estudiantes dentro del campus a mejorar sus emociones, y dado que las clases en esta institución han cambiado a la modalidad on-line por la llegada del Coronavirus SARS-CoV-2, este perrito y sus colegas ahora dan sesiones por videollamada a quien las solicite.
El trabajo de Moose es de suma importancia, pues gracias a su constante apoyo a los estudiantes estos han logrado que la salud mental deje de ser vista como un tabú y se tome como un tema necesario para el bienestar del alumnado.
Pese a que en febrero este can fue diagnosticado con un cáncer de próstata, su comunidad sigue brindándole amor y apoyo, mientras se mantienen al tanto de las mejorías y revisiones médicas.
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Según lo reportan personas cercanas a él, Moose no ha presentado alteraciones en su estado de ánimo, por tanto se cree que su recuperación va en buen camino.
La salud mental es un tema de importancia global, pues al año miles de personas sufren graves casos de ansiedad, ira, mal manejo de emociones y otros episodios que los conducen a la depresión y otros trastornos psicológicos, por lo que hablar con la familia, amigos y personas de confianza sobre el estado de nuestra mente puede hacer una gran diferencia en cada uno de nosotros.
Acudir con un profesional cuando las cosas se van complicando no es nada malo ni un motivo de alarma, pues tanto estas como las terapias asistidas con animales cada vez cobran más popularidad permitiéndonos mejorar nuestra relación con nosotros mismos y con los demás.
Crédito:Televisa News