Una boda generó polémica en México, luego de que el novio llegara al sacramento caracterizado como un soldado Nazi, junto a otros tres amigos.
Los hechos ocurrieron en Tlaxcala, lugar donde Fernando y Josefina contrajeron matrimonio el pasado 29 de abril, mismo día en el que Adolf Hitler se casó con Eva Braun. Según consignó Milenio, la fecha es significativa para el novio, ya que este mismo recalcó que “si no hubiéramos encontrado misa para hoy, nos habríamos casado hasta el otro año”.
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El propio hombre reveló que pertenece a un club que recrea una serie de acontecimientos bélicos, en compañía de una veintena de integrantes más. De hecho, Fernando llegó hasta la ceremonia con un traje gris de la Waffen SS, un cuerpo de élite de las Schutzstaffel, el brazo armado de Hitler.
La pareja, a día de hoy, tiene dos hijos, ambos bautizados por figuras alemanas de la Segunda Guerra Mundial, siendo el niño nombrado Reinhard por el general Reinhard Heydich, mientras que la niña Hanna Gertrud por Hanna Reitsch, célebre piloto del ejército nazi que habría rescatado a Hitler de un búncker y Gertrud Scholtz-Klink, presidenta de la Liga nacional de Mujeres Nacionalsocialistas.
Hace seis años que Fernando y Josefina contrajeron nupcias en el registro civil de Ecatepec, instancia donde ella utilizó una esvástica, pero ahora para la ceremonia en la iglesia decidió no utilizar ningún símbolo alusivo al ejército nazi.
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Según dijo la novia “yo no sabía mucho de la historia pero me la contó mi esposo y lo apoyo porque tengo a un marido responsable”, mientras que su pareja reveló que hasta han recibido amenazas de muerte por las fotos donde utilizan vestuario alemán de la Segunda Guerra.
El citado medio le consultó a Fernando si admiraba a Hitler, ante lo cual respondió afirmativamente indicando que “yo sé que para mucha gente Hitler es un genocida, un símbolo del racismo y de la violencia. Pero la gente juzga sin tener información o por creer en la historia de los vencedores”.
También, dijo que sus creencias le han traído problemas, revelando que “como mi papá y mis tíos también son seguidores de la NS, desde niño me ha confrontado la gente. Me han pegado, me han escupido y hasta me han aventado el carro cuando voy manejando mi vochito. La peor ha sido la vez en que me apuntaron con una pistola y me gritaron nazi. Pero lo bonito de amar un ideal es morir por él”.
Además del novio, otros tres amigos suyos fueron caracterizados como soldados de la Segunda Guerra Mundial (1939 – 1945).
Crédito: 24 Horas
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