Para algunos seres vivos el ecosistema en que habitaban llegó a su fin. Para la presa ‘El Muerto’ ubicada en Tlaxco, su nombre lo dice todo, ya no hay vida acuática y la terrestre tuvo que abandonar ese lugar.
Las parvadas de aves migratorias que arribaban a el invierno se ausentaron; empero, algunas nativas permanecen ahí, entre un canal de aguas contaminadas a la espera de la muerte.
El ambiente es desolador y duele a la vista. La tierra también llora, se está partiendo. Durante el estiaje, no hay cura para este mal que cada día aumenta, porque no hay bosques y pocos siembran un árbol.
Desde el año pasado se respira aire caliente; las grietas son el dolor que esta tierra padece. Hasta el pastor que al despuntar la mañana visitaba el lugar reciente el cambio climático, no hay agua para que beban sus ovejas.
¡Y qué ironía! En la presa ‘El Muerto’, construida hace 35 años, un pescador dejó abandonada una barca, muy similar a la Barca de la Fe, edificada en la misma década, en ese lugar llamado San Andrés Buenavista.
Y ninguna autoridad decide sobre los estragos que enfrenta la madre naturaleza. La única cura a estas profundas heridas es la lluvia, la que esperan con anhelo los hombres del campo.
Pero, la panorámica se vive en la mayoría de los cuerpos receptores de agua pluvial en Tlaxcala, incluye a las presas ‘Sol’ y ‘Luna’ ubicadas en Panotla y Hueyotlipan.
Rezar, quizá sea la mejor alternativa para los hombres del campo, aunque al santo que le piden San Isidro Labrador se conmemora el 15 de mayo.
Para otro sector de la población, hay indiferencia de lo que pasa en esta sequía atemporal, donde muchos no se pueden explicar por qué se registran heladas, sequías y granizadas en una variación de horas.
El Sol de Tlaxcala estuvo ahí, constatando con imágenes de las áreas, el daño colateral que se presenta desde que ha dejado de llover.
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Viven de la presa Atlanga 750 familias
De la presa Atlangatepec subsisten unas 750 familias de la zona rural, quienes se dedican a la pesca, ganadería y campo desde hace 40 años.
El alcalde José Macías González reveló que la pérdida de agua en la presa preocupa a la población que la visita. A pesar de ello, expuso que durante esta administración, su Gobierno apoyó con la siembra de un millón de crías al año para que cuatro agrupaciones pesqueras subsistan.
“Hay contaminación por aguas residuales y flora acuática, evaporación por aumento de la temperatura, lo que ahuyenta la migración de aves por la falta de lluvia”
Asimismo, mencionó que, por ello, realizan trabajos de limpieza a fin de mantener libre de basura las inmediaciones del cuerpo de agua y denuncian a quienes la contaminan. Afirmó que hacen falta trabajos de desazolve, pues lirio y tule han invadido parte de la infraestructura.
Día mundial de la Tierra
A propósito del Día Mundial de la Tierra que se conmemora cada 22 de abril, el problema de la erosión de los suelos en la entidad aumenta.
El cambio climático forma parte de la nueva agenda del gobierno de la República, pero no se han tomado medidas urgentes para solucionar el problema.
Contrario a ello, la actual administración de Andrés Manuel López Obrador canceló más de 70 millones de pesos a Tlaxcala por año, que eran utilizados para la construcción de zanjas, saneamiento de bosques y campañas de reforestación.
Desde 2018, la Coordinación General de Ecología reforesta la Malinche con unas 500 mil plantas, cuando el programa anual era de 4.5 millones de pinos.
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Con erosión el 76 % del suelo
La sequía, las plagas y los incendios forestales, han incrementado los daños a la tierra.
Un estudio del Colegio de Postgraduados realizado por Angélica Gutiérrez del Valle, para obtener el grado de maestra en Ciencias de Montecillo, revela que Tlaxcala es uno de los estados con mayores porcentajes de degradación.
Un 76.8 % de la erosión hídrica es el principal proceso en 58 sitios muestreados en Huamantla, Terrenate, Tlaxco, Españita, Calpulalpan e Ixtacuixtla, precisa la investigación realizada en 2014.
Así, la erosión hídrica del suelo -concluye el documento-, es el resultado de un cambio de uso de suelo forestal a producción de maíz.
“Hay contaminación por aguas residuales y flora acuática, evaporación por aumento de la temperatura, lo que ahuyenta la migración de aves por la falta de lluvia” Alcalde de Atlangatepec, José Macías González.
Crédito: el sol de Tlaxcala
Por: @MTPNoticias