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La primera sesión ordinaria de la nueva Cámara de Diputados arrancó con un pleito… entre legisladores de la bancada de Morena.
Gerardo Fernández Noroña, diputado de Morena, inició la discusión al reclamar al presidente de la mesa directiva —y legislador de su bancada— Porfirio Muñoz Ledo por asistir, el lunes, a la ceremonia del sexto informe de gobierno del presidente Enrique Peña Nieto.
“No acepto ninguna censura porque los actos públicos de los diputados son nuestra exclusiva responsabilidad ciudadana y política”, respondió Muñoz Ledo.
Pero Fernández Noroña no quedó satisfecho. Siguió con los reclamos y solicitó una moción de orden, que Muñoz Ledo le negó. Sin mencionar su nombre, el presidente de la Cámara acusó a su compañero de bancada de agredirlo e incluso, veladamente, amagó con promover su desafuero.
“Quiero decir que tanto el diputado como yo fuimos agredidos por otro miembro de este Congreso, lo que es inaceptable. Por fortuna, la iniciativa de reforma constitucional sobre el fuero legal será presentado por el diputado Pablo Gómez” Porfirio Muñoz Ledo
Noroña insistió y después de que se le negara nuevamente una moción que había solicitado, se plantó en la tribuna —donde estaba la legisladora Ana Gabriela Guevara— para confrontar a Muñoz Ledo.
Después de un cruce de palabras y entre protestas de los demás diputados, Gerardo Fernández Noroña tomó el micrófono y reprochó nuevamente al líder de la Cámara.
“No le voy a tolerar su falta de respeto, no le voy a tolerar su insolencia”, increpó.
“No soy insolente. Usted es un golpeador”, respondió Muñoz Ledo.
Para poner fin a la confrontación, Porfirio Muñoz Ledo sometió a votación la posibilidad de que el diputado de Morena subiera a tribuna y, oficialmente, manifestara sus inconformidades. La propuesta fue rechazada por mayoría.
Crédito: ADN político
