Alejandro Camacho
La reconstrucción en edificios históricos va lenta en el estado de Puebla a un año del sismo del 19 de septiembre. De los 621 templos e inmuebles dañados, solo 93 que son equivalentes al 15 por ciento, ya fueron restaurados en su totalidad.
En un reporte del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) hay 528 construcciones antiguas que no han sido intervenidas, como la iglesia de Atzala que será restaurada a partir del año 2019, y en otras la reparación lleva un avance del 45 por ciento.
¿A qué se debe que la reconstrucción es lenta?
En entrevista con MTP Noticias, el delegado en Puebla del INAH, Víctor Hugo Valencia Valera, comentó que se debe a los trámites que se hacen ante el Fonden (Fondo Nacional de Desastres Naturales), puesto que son grandes cantidades de dinero las que se requieren.
Pero sobre todo a la complejidad de las labores de reconstrucción, porque debe aplicarse la norma para el cuidado del patrimonio.
El funcionario explicó que continúan las labores en los municipios de Atzala, Atlixco, Izúcar de Matamoros, Chietla, Chiautla de Tapia y otras zonas que colindan con los estados de Morelos y Guerrero.
Clasificación de daños en los inmuebles
De las construcciones lastimadas por el temblor del 19 de septiembre de 2017: 380 presentaron daños medianos, 220 menores y el resto que con daños graves.
“Tras concluir el censo de daños en inmuebles con arquitectura religiosa e histórica, identificamos un total de 621 edificios afectados tanto al interior del estado como en la capital, trabajamos con los ajustadores para acceder al seguro y hemos venido haciendo los trabajos de reconstrucción”, dijo el delegado.
En el caso de la capital especificó que de los 80 inmuebles afectados entre iglesias y casonas históricas, ya 25 de ellos ya fueron abiertos al público.
El funcionario federal aceptó que el proceso es lento por falta de recursos, lo costoso de las obras, los casos son más graves y porque se requieren normas específicas para atenderlos.
Hasta 2020 concluirá la reconstrucción total
El delegado del INAH reconoció que hay casos de inmuebles religiosos e históricos de los que se prolongará su atención total hasta 2020.
Casos como las iglesias de Atzala, Huaquechula, Tochimilco, Huilango y Chietla, serán intervenidas hasta 2019 para que al siguiente año queden restauradas.
Lo anterior, explicó se debe a que prácticamente estos espacios religiosos quedaron en ruinas luego del sismo del pasado 19 de septiembre.
“Venimos trabajando desde que se registró el sismo en 2017, pero por lo complicado de algunos inmuebles que quedaron destruidos en su totalidad, hemos prolongado los trabajos todo este año, se seguirá en 2019 y esperamos que en 2020, se construyan los trabajos en los casos más graves”.
Los edificios que quedaron literalmente “infartados” requieren de trabajos específicos en estas comunidades como estudios estructurales y de cimentación para elaborar proyectos estables que garanticen la seguridad de los habitantes.
El templo de Atzala en ruinas
Víctor Hugo Valencia puso como ejemplo el caso del templo de Atzala, el cual se desplomó el año anterior, enterrando a una familia que participaba en la misa del bautizo de la bebé Elideth Torres, con un saldo de 12 personas fallecidas.
El delegado informó que en este caso será programada su reconstrucción hasta 2019, debido a que de toda la estructura solo quedaron sus paredones en pie. Es también el caso de Huaquechula que quedó gravemente dañado por el sismo pero también por sus 400 años de antigüedad.
En el caso de la capital poblana reiteró que la Capilla de Dolores ya fue abierta al público, San Roque y la Casa del Alfeñique están por concluir en sus trabajos.
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