No fue un bebé, ni feto lo que se encontró en un terreno baldío el pasado lunes 31 de enero en el municipio de Tlacotepec de Benito Juárez en Puebla, sino sapos utilizados en un presunto ritual de brujería.
La tarde del lunes pasado, vecinos de la localidad de San Marcos Tlacoyalco perteneciente al municipio antes citado se alarmaron al encontrar ropa de bebé semienterrada en un terreno baldío del barrio de La Columna, causando una fuerte movilización policíaca.
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De acuerdo a los primeros reportes, se sabía que el presunto cuerpo se encontraba envuelto en cobijas y se encontraba en un avanzado estado de descomposición, por lo que se resguardo la zona para las diligencias correspondientes.
Ante esto se descartó que el hallazgo realizado por vecinos se tratara del cuerpo de un bebé, informando que lo que se encontraba envuelto en las cobijas, eran varios sapos los cuales desprendían este mal olor.
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Se presume que estos animales forman parte de algún tipo de ritual de brujería, a lo que habitantes de la zona comunicaron que no es común encontrar este tipo de objetos, por lo que pensaron se podría tratar del cuerpo de un bebé.