Guadalupe tiene ocho años sin ver a su hija, su expareja sentimental se la arrebató cuando la pequeña tenía apenas un año y 10 meses de edad; aunque un juez en Puebla le dió la guarda y custodia definitiva a ella, el hombre se niega a entregarla.
Se trata de un caso más de violencia vicaria en Puebla, en donde la pequeña lleva dos mil 922 días alejada de su madre, quien no ha dejado de buscar estar cerca de ella un sólo día.
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En agosto del 2015, Mauro le arrebató a Guadalupe a la menor de un año y 10 meses y con artimañas consiguió la guarda y custodia provisional.
Ante la violencia vicaria que Mauro ejerce sobre Guadalupe, ella se ha perdido los cumpleaños de su pequeña de iniciales LPP, no ha podido celebrar un día de las madres a su lado, no estuvo en su primer día de clases y se ha encontrado con infinidad de obstáculos en su lucha por la justicia.
La Colectiva Madres Exigiendo Justicia contra la Violencia Vicaría, documentó en las redes sociales, que el hombre violenta los derechos de la pequeña actualmente de nueve años y 10 meses de edad.
Llamó a las autoridades a que protejan a Guadalupe y a su hija, que salvaguarden sus derechos de la menor y que juzguen con perspectiva de género.
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Mauro se ha valido de varias artimañas legales para mantener a la pequeña de iniciales LPP, lejos de su madre Guadalupe, quien no ha dejado de luchar por estar cerca de ella.
Después de una lucha de varios años, el 21 de marzo de 2022, el hombre fue vinculado a proceso por el delito de sustracción.
El 28 de junio de 2023, la Cuarta Sala en Materia Civil del Poder Judicial del Estado de Puebla, otorgó la guarda y custodia definitiva de la pequeña a su madre Guadalupe.
Mauro promovió un amparo para evitar que la menor y su madre estén juntas.
Este viernes 20 de octubre de 2023 por tercera vez, Guadalupe fue citada a una audiencia de suspensión condicional del proceso de Mauro, solicitada por la defensa legal del mismo por el delito de sustracción.