Gerardo Espinosa solo llevaba 20 días como vicario en el municipio de Aquixtla, Puebla, y ya lo quieren linchar los pobladores, pues lo acusan de violar a un niño.
La tarde noche de este 27 de octubre se registró una movilización policiaca en el templo del Padre Jesús, donde el sacerdote se encontraba escondido, por miedo a salir y a ser atrapado.
En redes sociales su fotografía fue difundida con un mensaje de “Se busca por violador”, versión que se propagó de forma inmediata entre la población de este municipio ubicado en la Sierra Norte de Puebla.
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Los habitantes que se concentraron afuera del templo del Padre Jesús exigían a las autoridades encarcelarlo.
Incluso se difundió la versión que ya existe una orden de aprehensión en su contra, pero no se ha precisado si es por el delito que lo acusan en Aquixtla o corresponde a otro lugar.
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Este vicario llegó a principios de octubre a Aquixtla y tan pronto consiguió el odio de la gente. Es originario de Pachuca, Hidalgo.
Habitantes afirmaron que el cura José que lleva muchos años en este municipio fue quien denunció al vicario, al no tolerar abusos contra un menor de edad.
Por Alfredo Ramírez
