San Martín Texmelucan, Pue. María Elizabeth Orea era maestra en Pedagogía en la Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), especializada en neuromotricidad y neurointervención infantil. Dedicaba su tiempo y esfuerzo a la docencia y rehabilitación de niños, hasta que el pasado viernes le arrebataron la vida al asfixiarla con un cable al interior de su hogar.
Sus familiares presumen que fue el ex marido, Jorge Ernesto “N” quien la privó de la vida, pues testigos vieron cuando discutieron a las afueras del domicilio en la colonia Magisterial, para después meter a Eli a empujones a su casa. Minutos después fue visto huyendo con sus hijos Jorge y Leonardo Ramos, a bordo de un auto Sonic de color gris modelo 2014.
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“El día de ayer (viernes 14 de febrero) ella regresó del trabajo a su casa, donde la esperaba Jorge Ernesto para que le entregara a los menores, ya que compartían la custodia, ella cuidándolos entre semana y él los fines. Un vecino asegura haber visto cuando Jorge Ernesto la metió a empujones a la casa, mientras los niños permanecían en el auto”, relató una de las primas de la occisa.
“Los vecinos escucharon una violenta discusión, y llamaron a la policía, pero antes de que estos llegaran, vieron salir a Jorge Ernesto con prisa. Al arribar la policía al domicilio, encontraron a Eli ahorcada con un cable”, agregó.
El cuerpo de la joven de 32 años de edad, fue entregado a sus padres y hermanos la noche de este sábado, luego de que le realizaran la necropsia de rigor. Sus familiares consideraron repugnante que la misoginia siga cobrando vida de mujeres y niñas en nuestro país.
“El estado tiene que emprender acciones claras para garantizar justicia a esta familia, y de igual forma evitar que esto siga pasando”, reclamó uno de los familiares.
Por Luisa Tirzo
