“No permitiré expresiones violentas en Puebla”, aseguró el gobernador Miguel Barbosa Huerta, derivado por los disturbios y actos vandálicos de ciudadanos en Amozoc, tras pedir la renuncia de su presidente municipal, Mario de la Rosa Romero.
En entrevista, durante su gira por Chignahuapan, dijo que en gran medida es “un asunto de intereses de partidos políticos que están aprovechando el conflicto”.
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Por lo anterior, aseguró que estas acciones no se quedarán en la impunidad, por lo que la “autoridad ya se encuentra investigando para determinar la responsabilidad de los autores de los disturbios”.
“Ayer hubo una expresión violenta de 200 o 300 personas que tiene que ver con inconformidades y sí, se tiene que esclarecer. Cualquier autoridad debe rendir cuentas y tener una relación sana con la sociedad, pero no vamos a permitir que ese tipo de acciones violentas se estén dando en el estado”, aseveró.
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Informó que ya está buscando el diálogo, empero, dijo que no son las formas, debido a que es más un interés político, a presiones que utilizan los “que negocian con el agua y otros más” para ejercer una presión de una manera ilegal.
“Son asuntos de intereses, por ejemplo, con la escandalosa presencia de hasta 150 pipas de agua que tiene que ver con que ya no se les permite suministrarse de agua de pozos, son presiones y conflicto de intereses de partidos políticos que están aprovechando el problema, como la toma de carreteras, el cierre de la presidencia municipal, eso es absolutamente ilegal”, señaló.
Por Griss MorenoS
