La empresa Servicios Aéreos del Altiplano S.A. de C.V. (SAASA, por su nombre comercial) que rentó el helicóptero Agusta A109 en el que fallecieron Martha Erika Alonso, gobernadora de Puebla, y Rafael Moreno Valle, senador y ex mandatario de la entidad, está en la mira de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) debido a que omitió cambiar el actuador lineal de roll pese que fue reportado desde el 13 de diciembre del 2018, 11 días antes de que se desplomara la aeronave.
Lo anterior se deriva del informe preliminar que dio a conocer este 25 de octubre la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, en el que se expone que en dicha fecha, dos trabajadores de la componía pidieron que se sustituyera dicha pieza, pero no se hizo hasta ese accidente del 24 de diciembre del 2018 cuando perdieron la vida ambos gobernadores y tres personas más.
El documento especifica que existen evidencias de correos electrónicos que dan cuenta que el 19 de diciembre de ese año, en los Rotor Flight Services (RFS) y Precision Accesories y Instruments (PPHP-PAL) iniciaron el procedimiento de reclamo de garantía de actuador de roll.
La compañía sospechosa se constituyó como sociedad el 24 de agosto de 2005 en Huejotzingo, Puebla, municipio donde se encontró la aeronave en la víspera de Navidad. Sus dueños son los empresarios José Antonio Torre Mendoza, de 61 años de edad, originario de Jalapa, Veracruz, y radicado en Tlaxcala; y Rafael Torre Mendoza de 55 años, originario y radicado en Tlaxcala, según refiere información del Registro Público de Comercio de la región.
“Desde el 13 de diciembre de 2018, el helicóptero continúo operando sin que los técnicos hubieran asentado en las bitácora que el SAS2 estaba fuera de servicio por MEL y que se requería del reemplazo del componente a más tardar el 17 de diciembre de 2018, de acuerdo con el MEL autorizado de Servicios Aéreos del Altiplano“, se lee en el documento.