El presidente municipal de Ajalpan, Ignacio Salvador Hernández solicitó licencia por un mes al cargo, luego de que su gobierno fuera relacionado con el crimen organizado por el propio gobernador Luis Miguel Barbosa.
Horas antes de que se separa del cargo, dejando en su lugar como suplente a su hijo, Ignacio Salvador Tirso, la Fiscalía General del Estado cateó al menos tres de sus propiedades, asegurando camionetas, autos y motocicletas.
Estas acciones se dan luego de que el pasado 2 de abril, el gobernador destacara que las autoridades de esta zona estaban coludidas con los delincuentes.
” Creo que eso de asumirse como Cártel Jalisco Nueva Generación ya es una deformación de membrete, pero en su primera acción les pasó esto y vamos a disolver esta célula de delincuentes, sean quienes sean. Todos están involucrados y hay hasta autoridades municipales involucradas”, señaló en esa ocasión.
Eso, al ser cuestionado sobre una presunta persecución y balacera entre policías y delincuentes tras un asalto el 30 de marzo pasado, aunque posteriormente trascendió que se habría tratado de un ajuste de cuentas por cobro de piso que involucraba a los policías municipales.
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Esa vez hubo seis personas heridas: dos civiles y cuatro policías. Dos integrantes de cada bando perdió la vida después.
En medio de este ajuste, el presidente municipal convocó la noche del sábado 4 de abril una sesión extraordinaria de Cabildo para pedir ausentarse del cargo mientras avanzan las investigaciones en su contra.
Por Luisa Tirza
