Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, fue detenido la tarde de este jueves y posteriormente liberado por elementos de la Guardia Nacional y de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Guzmán López fue vestido de militar y con un brazalete del Plan DN-III para entregarlo a miembros del cártel de Sinaloa.
Fuentes del gabinete de seguridad federal informaron a La Jornada que a Ovidio se le cubrió el rostro a medias y huyó en una camioneta.
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Una fotografía que circuló anoche de Ovidio en dicha situación confirmaría lo relatado por el diario.
Mientras los soldados e integrantes de la Guardia Nacional se retiraron y se resguardaron en instalaciones de la novena Zona Militar.
La versión oficial de los hechos señala que alrededor de 30 uniformados patrullaban en Culiacán, Sinaloa, cuando fueron atacados por hombres armados desde un inmueble.
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Los oficiales respondieron el ataque y resguardaron el lugar, donde había cuatro personas entre ellas a Ovidio Guzmán López.
Ya neutralizado por las fuerzas federales, miembros del cártel rodearon el inmueble y comenzaron hechos violentos en diversas zonas de la capital sinaloense para que fuera liberado el hijo de “El Chapo”.
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Para evitar la violencia y una posible masacre en contra de los uniformados, se decidió la liberación de Guzmán López.
Ovidio es apodado como “El Ratón” o “El Ratón Nuevo”, su madre es Griselda López, segunda esposa de “El Chapo”.
El cártel de Sinaloa es la segunda organización criminal con mayor presencia en México, según la Fiscalía General de la República, operando de forma oficial en siete entidades del país.
Crédito: La Silla Rota
