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Javier Rojas Alonso, comisario de la Policía Municipal de Amozoc habría ordenado la ejecución de los seis elementos de la corporación el pasado viernes, luego de que éstos denunciaron ante la Contraloría comunal que aquel forma parte de una banda de huachicoleros a quienes desde su puesto brindaba protección e impunidad, manifestaron fuentes cercanas a las investigaciones.
De acuerdo con La jornada de Oriente, se informó que Rojas Alonso fue despedido la semana pasada luego de que la Contraloría Municipal, a cargo de Alejandro González, habría confirmado los vínculos entre el comisario y Rojas Alonso, aseguraron las fuentes.
El ex comisario y otro alto mando de la corporación fueron detenidos la madrugada del pasado sábado y junto con otro par de civiles también aprehendidos, están siendo investigados por las ejecuciones de los uniformados: Laura Rojas Romero, Martín Estudillo Vergara, David Ortega Menchi, Arturo Hernández Gallardo, Alejandro Muñoz Antonio y José Luis Montes Anaya.
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De hecho, desde el viernes, horas después de cometidos los crímenes, 20 elementos que integran la fuerza pública de Amozoc de Mota fueron llevados, en calidad de testigos, por agentes de la Policía Ministerial a declarar a las instalaciones centrales de la Fiscalía General del Estado (FGE), hasta donde también fueron arrastradas dos patrullas de la corporación.
Tras rendir su testimonio ante el agente del Ministerio Público, los gendarmes volvieron a sus funciones.
En Amozoc, la Secretaría de la Marina Armada de México realizó rondines durante el pasado fin de semana.
Es así como se ha ido desvaneciendo la versión oficial brindada por el alcalde de Amozoc de Mota, José Cruz Sánchez, y el titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Jesús Morales Rodríguez, la tarde del viernes, apenas tres horas después de los hechos.
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Según lo dicho por las autoridades, los seis policías municipales de Amozoc fueron asesinados en un enfrentamiento con huachicoleros suscitado la tarde de este viernes.
La versión de una confrontación fue puesta en duda por el regidor Luis Terrazas, quien denunció que las víctimas acudieron el jueves a la Fiscalía General del Estado (FGE) para hacer una denuncia, aunque no precisó la materia de ésta.
Los homicidios ocurrieron en la colonia Signoret, en el paraje conocido como Tanque Elevado de la junta auxiliar Chachapa, perteneciente al municipio de Amozoc.
A decir de José Cruz Sánchez, las víctimas sorprendieron a los delincuentes mientras realizaban una ordeña clandestina a ductos de Pemex.
Tras la refriega, los huachicoleros habrían huido en dos camionetas, una de color rojo y otra negra con rumbo a San Miguel Espejo.
En las redes sociales circularon fotografías de usuarios y medios de comunicación, en las que se ven los cadáveres de los uniformados, los cuales aparecen juntos, boca abajo, como acomodados y no se aprecian heridas en los cuerpos, como si hubieran sido ejecutados.
Elementos de las Policías Ministerial y Federal, así como del Ejército y de la Secretaría de Seguridad Pública peinaron la zona en busca de los homicidas.
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Por la noche, el alcalde de Amozoc, José Cruz Sánchez Rojas, y el titular de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal, Jesús Morales Rodríguez, ofrecieron una rueda de medios en la que informó que fueron vecinos de la zona quienes hallaron a los policías muertos y que hay dos detenidos y una pipa confiscada.
Cuando terminó la conferencia, Luis Terrazas el regidor de Agricultura del ayuntamiento de Amozoc, irrumpió y le exigió a Morales una investigación a fondo pues aseguró tener información de que los seis policías ultimados acudieron el pasado jueves a la FGE a hacer una denuncia, aunque no quiso precisar de qué se trataba.
Versiones extraoficiales recopiladas entre pobladores de Chachapa, aseguran que los gendarmes fueron emboscados, pues acudieron a una falsa alarma de auxilio y cuando llegaron a Tanque Elevado, fueron desarmados y ejecutados.
Antecedentes
El 30 de agosto de 2016, ocho elementos de la Policía Municipal de Amozoc, fueron detenidos la por policías estatales, supuestamente por haber confesado ser protectores de huachicoleros.
Según la versión oficial, dada a conocer el mismo día de la detención por el entonces titular de la Secretaría de Seguridad Pública y Vialidad del gobierno del estado, Jesús Rodríguez Almeida, agentes de la Policía Estatal acudieron durante la madrugada a atender una denuncia sobre el hurto de combustible en líneas de la paraestatal, ubicadas entre la cabecera municipal de Amozoc y la junta auxiliar de Chachapa, pero cuando llegaron fueron emboscados por los delincuentes y sus cómplices, los policías municipales y el auxiliar.
Sin embargo, el 7 de septiembre siguiente los agentes fueron liberados, debido a que el Ministerio Público presentó idénticas las declaraciones de los policías estatales que presuntamente fueron agredidos por los acusados.
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El 27 de octubre del mismo año, un total de 25 policías municipales de Amozoc fueron despedidos por el alcalde José Cruz Sánchez, por estar vinculados a los ocho agentes que el pasado 30 de agosto fueron acusados por la FGE de proteger a ladrones de hidrocarburos.
Halconcitos
El 27 de febrero del presente año, Alfredo Ramírez Rodríguez, presidente de la asociación civil Recuperemos Nuestras Raíces, denunció que hasta 3 mil pesos diarios perciben los llamados halconcitos en Amozoc, uno de los municipios con mayor incidencia de robo de combustible.
Ramírez Añadió que en los meses recientes se ha incrementado el número de menores de edad que se involucran con las bandas de delincuencia organizada que se dedican a ordeñar ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex), aunque no reveló cifras.
“Lamentablemente estamos en una zona dentro del famoso triángulo rojo, eso implica que haya mucho robo de combustible, que gente que viene de paso en automático se le hace fácil comete fechorías en el momento; van, salen, entran y cometen sus delitos”.
Crédito: La Jornada de Oriente
Foto: Municipios Puebla
