ADN Político
Ahora sí, las campañas rumbo a las elecciones del 1 de julio tuvieron su banderazo formal en los primeros minutos de este viernes. Aquí te decimos en qué condiciones arranca cada contendiente.
Ricardo Anaya: PAN-PRD-MC
Para Ricardo Anaya, el periodo de intercampaña inició con el pie izquierdo. Durante al menos dos semanas, el panista se mantuvo en la mira por las acusaciones de un grupo de particulares y de sus rivales políticos en el sentido de que —afirman— participó en una operación de triangulación de recursos para beneficiarse de la compraventa de una bodega en Querétaro, algo que él niega.
Las tensiones crecieron a raíz de la intervención de la Procuraduría General de la República (PGR), que investiga el caso, aunque Anaya sostiene que solo actúa con fines políticos para favorecer al PRI.
Pero no todo fueron tragos amargos para Anaya. En intercampaña, el panista —igual que otros presidenciables— tuvo la oportunidad de desfilar ante líderes de los sectores productivos del país. También mostró su lado geek en videos sobre avances tecnológicos y, sobre todo, buscó posicionarse como la persona que puede disputar la elección al puntero López Obrador.
Andrés Manuel López Obrador: Morena-PT-PES
En su tercera contienda presidencial, Andrés Manuel López Obrador llega al inicio de la campaña como puntero en las encuestas y con un discurso en el que se muestra confiado en que —ahora sí— logrará ganar las elecciones.
Durante el periodo de intercampaña, se dedicó a repetir sus promesas de cambio para México a través del combate a la corrupción, de la austeridad y de la “reconciliación”, así como a insistir en que se inspirará en la presidencia de Benito Juárez. No obstante, tampoco quedó libre de polémicas.
Una de ellas derivó de su negativa a debatir con sus rivales Ricardo Anaya y José Antonio Meade. Otra comenzó después de que dijo que, si no hay elecciones limpias, se soltará un “tigre”. Y una más, que le valió críticas de Anaya, surgió luego de que señaló que estaría dispuesto a “fumar la pipa de la paz” con el presidente Enrique Peña Nieto, y que no lo perseguirá porque no busca una venganza política.
José Antonio Meade: PRI-PVEM-Panal
A diferencia de Enrique Peña Nieto en 2012, el abanderado priista comienza su campaña hacia el 1 de julio en la tercera posición, según las más recientes encuestas. El exsecretario de Hacienda, quien nunca ha participado en una contienda electoral y no milita en el PRI, ha emprendido un camino cuesta arriba al final del cual asegura que su proyecto será el ganador.
En las cerca de seis semanas que duró el periodo de intercampañas, Meade navegó entre los ataques a sus rivales y la exposición de algunas de sus propuestas, con las que asegura que podrá llevar al país a ser una “potencia mundial”.
Además, encabezó al menos tres eventos emblemáticos para el PRI —su toma de protesta como candidato, el 89 aniversario del partido y el aniversario luctuoso de Luis Donaldo Colosio—, y ahora encara el reto de conseguir que el tricolor se mantenga en el poder, pese a los reclamos sociales hacia lo que representa el priismo y en particular hacia algunos de sus gobernadores.
Margarita Zavala: Independiente
Aunque el aval a su candidatura independiente no estaba asegurado, Margarita Zavala usó el periodo de intercampaña para preparar su camino hacia la contienda: renovó la imagen de su campaña, se presentó como la candidata de los valores y dio a conocer a su equipo, entre otras cosas.
El 16 de marzo, ella y sus colaboradores recibieron la noticia que esperaban. Ese día, el INE informó que Zavala recabó 870,168 firmas de apoyo ciudadano a su aspiración sin partido, con una dispersión geográfica en 21 entidades. Con ello, la exprimera dama se abrió su camino a la boleta, en contraste con Jaime Rodríguez Calderón, El Bronco, y con Armando Ríos Piter.
Ahora, sin embargo, Zavala inicia el desafío de subir en la intención de voto y convertirse en una opción competitiva.
