teatro del pueblo
911

Gerardo Pérez García

Charles Louis de Secodat, barón de Montesquieu, preconizó el principio de separación de poderes.

En la guerra de Independencia de las antiguas colonias americanas en contra del Imperio Británico se adoptó dicho principio como uno de los ideales libertarios y, a la postre, el mismo se implementó por primera vez en una Constitución en el mundo.

“El poder dimana del pueblo” se estableció como máxima en la Constitución Americana de 1776, en la cual ‘los padres fundadores’ de los Estados Unidos adoptaron las ideas de los liberales franceses.

Después el mismo principio fue perfeccionado en la Revolución Francesa de 1789 en la que quedó claro:

“el poder del Estado no podía ni debía ser ejercido por un solo hombre”.

Desafortunadamente en -nuestro- Estado de Puebla el ex gobernador Rafael Moreno Valle acabó con ese principio, puesto que durante su mandato sometió al Congreso Local y sojuzgó al Poder Judicial del Estado atiborrándolo de Magistrados fuereños, inexpertos y desconocedores del Derecho.

Montesquieu, sin duda ha de estar revolcándose en su sepulcro, ubicado en la Iglesia de San Eustaquio en París, ante los excesos del ex mandatario.

Y esa actitud sigue perenne hasta la presente data,

Moreno Valle está sin estar en Puebla.
Manda sin mandar.
Ordena sin ordenar.
Ejecuta sin ejecutar.

-Porque- muchas decisiones de Estado se toman en la ‘Mansión de las Fuentes’ en lugar de la Residencia Oficial Casa Puebla.

Rafael Moreno Valle no es omnisciente ni omnipresente, pero está en todos lados y se halla perfectamente sabedor de todo lo que ocurre en Puebla y sigue decidiendo qué hacer y qué no hacer.

Esta aserción se confirma con el hecho de que recientemente trascendió que algunos Magistrados del Poder Judicial Local fueron ‘invitados’ a jubilarse.
De esta forma habría -o habrá- tres vacantes en el seno de la Judicatura Poblana.
Veamos:
La primera corresponde a la que dejó el Magistrado José Saúl Gutiérrez Villarreal, quien por primera vez en la historia de Puebla -15 de febrero de este año- dimitió al cargo en medio de un gran escándalo de corrupción.

-Trascendió- le ‘encontraron’ cientos de plazas de aviadores, desvió de recursos y hasta la autorización de un “chef personal” para el “dimitido” Presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado ‘Bobby’ Roberto Flores Toledano.

-Dicen- que esas fueron algunas de las acciones que le atribuyeron al hoy defenestrado togado como encargado de la entonces Junta de Administración del Poder Judicial Estatal.

Curiosamente desde febrero su plaza continúa vacante.
Solo que para el morenovallismo ello no era importante.

Pero ante el “tsunami pejista” que se avecina en Puebla y ante el riesgo –real- de perder Casa Puebla en2018, las percepciones ya cambiaron.

A esa plaza vacante en la Judicatura Estatal se le sumarían las de las “jubilaciones voluntarias” de los magistrados Manuel Nicolás Ríos Torres y Miguel Sánchez Zavaleta, mismo al que sus cercanos apodan ‘Zobeck’ -por qué será, qué afición tendrá-.

Manuel Nicolás Ríos Torres despacha aún como integrante de la Tercera Sala Civil del TSJ.

Y a quien le tocó conocer en segunda instancia el litigio entre Manuel Bartlett y Javier Lozano Alarcón, mismo que a la postre ganó el primero gracias a la capacidad jurídica de su abogado el jurista Carlos Meza Viveros.

Por lo que respecta a Miguel Sánchez Zavaleta, es compadre de grado del otrora Presidente del TSJ, León Dumit Espinal, quien lo hizo Magistrado durante el marinismo y actualmente es integrante de la Tercera Sala Civil del TSJ.

Agregándose:

Don Miguel Sánchez disputó para sí la Notaria de Huauchinango, misma que a la postre ocupó el compadre de Germán Sierra Sánchez: Carlos Ferrao Rojas.

Pero ante el escenario de la probable derrota electoral… “el Señor de las Fuentes” decidió actuar.

Para empezar es un hecho consumado que el esposo de la actual Secretaria de Salud del Estado, Arely Sánchez Negrete: Ignacio Galván Zenteno, quien hasta el día de hoy se desempeña como Secretario del Juzgado Quinto de Distrito de Amparo en Materia Civil, Administrativa, del Trabajo y de Juicios Federales en el Estado, será nombrado por el Congreso morenovallista -en los próximos días- Magistrado titular en lugar de Saúl Gutiérrez Villarreal.

Quienes conocen a Ignacio Galván, dicen que es una persona decente, abogado egresado de la Escuela Libre de Derecho de Puebla y que su señor padre Ignacio Galván, fue Magistrado Federal, pero que él no pudo ascender a Juez de Distrito a pesar de llevar casi 25 años en la Judicatura Federal.

Y como no pudo escalar en la Federación esperó “la mano amiga” del otrora Señor de los Cerros para ser nombrado como Magistrado Local.

De ahí que surjan las interrogante:

¿El nombramiento de Ignacio Galván Zenteno se da como pago de facturas por algún asunto que como Secretario de Juzgado conoció y resolvió a favor del morenovallismo?

Vale recordar el caso de Amador Coutiño Chavarría, que fue nombrado Magistrado Local el 24 de noviembre de 2011 y quien es hijo del ex Gobernador de Chiapas, Amador Coutiño de Coss, quien gracias a los servicios prestados al morenovallismo como Secretario del otrora Juzgado Tercero de Distrito en el Estado -desechar las demandas de amparo de Ricardo Henaine contra la “expropiación” de Valle Fantástico-, actualmente despacha como Magistrado integrante de la Primera Sala Penal del Tribunal Superior de justicia del Estado.

¿El nombramiento del cónyuje de la Secretaria de Salud es un “guiño” a la gente del gobernador José Antonio Gali por parte de Moreno Valle, para que coadyuve a la conservación del poder mediante las “brigadas” en apoyo a Martha Erika Alonso –con recursos oficiales y en tiempo laborable- se despliegan todos los días desde la Secretaría de Salud Estatal?

¿O bien es una patada a Jorge Aguilar Chedrahui –cuya campaña no levanta- nombrar como Magistrado al consorte de su peor enemiga: Arely Sánchez Negrete, quien exhibió sus -presuntos- “turbios negocios” al llegar de titular de la Secretaria de Salud?

¿Por qué Ignacio Galván Zenteno no se excusó de conocer los asuntos del Gobierno del Estado como Secretario del Juzgado Quinto de Distrito de Amparo en Materia Civil, Administrativa, del Trabajo y de Juicios Federales?

¿Para quién será la lealtad de Ignacio Galván Zenteno como Magistrado, para Moreno Valle o para Gali Fayad o para ninguno de los dos?

Que conste, son preguntas.

Y de quien se dice va a sustituir a Manuel Nicolás Ríos Torres, es ni más ni menos que el actual Secretario Adjunto del Tribunal Superior de Justicia del Estado, Guillermo Morales Rodríguez.

Memo Morales, joven de escasos 40 años de edad, quien nunca ha sido Juez ni Secretario de juzgado y cuyo único mérito es ser el junior del Clan de ‘Los Morales’, hijo de Jesús Morales Flores y hermano del Secretario de Seguridad Pública, Jesús Morales Rodríguez.

Se dice que era quien tomaba las decisiones del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Puebla cuando Roberto Flores Toledano era titular.

Teléfono en mano daba instrucciones a los jueces para resolver un asunto de tal o cual manera diciendo que eran órdenes de Moreno Valle.

Y en muchos casos sí lo eran, empero, en otros tantos no.
Por eso ‘Memito’ Morales maneja un coche deportivo de súper lujo de modelo reciente.

Por cierto, quien más padeció las arbitrariedades del joven Guillermo Morales ha sido el Juez Jesús Sánchez Jiménez, quien como titular del Juzgado de Chiautla de Tapia fue encarcelado por el morenovallismo al no acatar una orden y desde ahí su batalla legal no ha tenido fin.

El Juez Sánchez Jiménez logró salir libre mediante al ganar un amparo, pero Memo Morales ha retrasado -y retrasa- el pago de salarios caídos.

Esas son algunas de las muchas historias que se pueden contar de Memo Morales como Secretario Adjunto del TSJ.

Además -se presume-, es protector de presuntos jueces corruptos como Helmo Mayoral Bello -quien fue su maestro en la UDLAP- y de ‘el pollo’ Jesús Ventura Hernández, quien es amigo personal de su papá Jesús Morales Flores.

Un personaje que como simple Secretario utilizó la ausencia virtual del titular en el Poder Judicial Estatal -porque Bobby era un cero a la izquierda- como un medio para gobernar el Poder Judicial y para enriquecerse.

¿Y Gali Fayad lo va a permitir?
¿De ese tamaño es el compromiso del morenovallismo con Jesús y Melquiades Morales Flores?
¿Qué le prometieron a Moreno Valle?
¿Ganar para su esposa Martha Erika Alonso de Moreno Valle, las elecciones en Distritos Electorales complejos como Tepeaca y Ciudad Serdán?
¿Y a todo esto, en dónde queda la carrera judicial?
¿No hay jueces o juezas competentes y honestos en Puebla que puedan ser nombrados Magistrados?

Dato curioso:

El Juez de Tecali de Herrera Rodolfo Arana Santiesteban, lleva más años de Juez que los que tiene Memo Morales de edad y el mismo –próximo a jubilarse- nunca logró ascender a Magistrado.

No cabe duda que en La “Puebla morenovallista” el apellido, el linaje y la estirpe… cuentan.

Y mucho.

Finalmente, el último cargo de Magistrado será ocupado por José Montiel Rodríguez, actual Subsecretario de Vinculación Política de la Secretaría General de Gobierno.

Se dice que es un brillante abogado egresado de la Escuela Libre de Derecho de Puebla.

Que ganó el segundo lugar nacional en el concurso de tesis de Licenciatura,

Actualmente es Juez Tercero Civil de la Capital con licencia en razón de servicio público.
Además ha enfrentado a ‘Bobby’ Flores Toledano muchas veces.

Célebre fue la ocasión cuando por órdenes de Moreno Valle y estando todavía Luis Maldonado Venegas al frente de la Secretaría General de Gobierno de Puebla, se mandó a llamar a Casa Aguayo a los Magistrados integrantes del Pleno Local para hacerlos firmar la entrega de los recursos propios del TSJ en favor de la Secretaria de Finanzas y Administración del Gobierno.

En esa reunión –cuenta una fuente que estuvo presente en la misma- nadie se opuso a las órdenes de Moreno Valle.

Todos los magistrados como “corderitos” aceptaron acatar las órdenes del “Estado soy yo” y el único que dijo que era inconstitucional lo que se estaba haciendo fue Pepe Montiel.

Flores Toledano estalló en cólera en contra de esas palabras que lo dejaban en evidencia y le dijo que él no podía opinar.

La respuesta de Montiel fue contundente:

“perdóneme señor Presidente, pero sigo siendo Juez y me interesa lo que pase con mi casa que es el Poder Judicial del Estado”.

De aquí la enésima interrogante:

¿Y los jueces?
¿Quién los toma en cuenta?
¿Se jubilarán siendo jueces sin posibilidad de ascender por más capaces u honestos que sean?

Teresa Osorio Cuellar, Ismael de Gante, entre otros, son ejemplos de que hay jueces probos en Puebla.

Desafortunadamente jamás llegarán a ser magistrados. Por ello, este primero de julio hay mucho en juego: continuidad o cambio.

Los poblanos decidirán.

Al tiempo.

 

 

LA VILLA
Gerardo Pérez

Gerardo Pérez

Periodista poblano