Meme Yamel
Apenas inició la LX Legislatura y aquellos chapulines que brincaran de un partido a otro con tal de aprovechar el hueso, nos dejan muy claro cuál es su código postal.
Los matices dentro del partido que nos ofrece la cuarta transformación nos han dejado muchos espacios en blanco, pero quizás el más estremecedor y claro es el del lugar que no cubre un legislador, frente a todos los demás.
José Juan Espinoza habló por todos los legisladores diciendo que los diputados de Morena tenían la disposición de trabajar coordinadamente con el estado en lo que resta de la administración, esto tras haber asistido a un lado de Tony Gali en el desfile cívico – militar de la pasada conmemoración a la independencia de México.
Con esto el famoso ‘JJ’ se autoproclamó el enlace entre el gobierno el saliente encabezado por Tony Gali y la legislatura local entrante. ¡Vaya! poco le falto a José Juan para decir que era el consentido de Andrés Manuel López Obrador porque muchos le quitarían ese título en un abrir y cerrar de ojos.
Esto se da al margen de dos eventos en particular, el primero; la negativa del presidente electo por reunirse con el actual mandatario poblano, al no tener claro que es lo que prosigue en el proceso de impugnación entre Barbosa y Martha Erika, por lo que sin esto resuelto no habrá reunión con Tony Gali y AMLO.
Como segundo evento, se da al margen de la toma de protesta de la nueva legislatura local, misma que utilizó la mayoría para no cederle el cargo a una mujer, como supuestamente estaba destinado, en la mesa directiva del congreso local y que fuera asumida por Biestro, quien también desmintió a José Juan.
Para los legítimos integrantes de Morena, se hace evidente que alguien está llevando la peste al nido, y mientras usan su mayoría para abrogar leyes que bien podrían ser reformadas porque tenían pies y cabeza, alguien que dejaron entrar a la casa está haciendo lo que quiere con tal de jalar agua para su molino.
¿Será que José Juan se vendió al mejor postor?… ¿De nuevo?
