Quién diría que la 4T en puebla traería consigo conflictos de intereses y peor aún, que evidenciara la falta de política interna que tienen para ‘amarrar’ un gabinete ejemplar.
En la historia truculenta de hoy, el caso Ruiz Argüelles y los infinitos cambios en la Secretaría de Salud.
Si usted es poblano, sabrá que los Ruiz son muy conocidos en el estado, que incluso, se les reconoce como una eminencia en análisis clínicos, incluso podría decirse que desde el inicio de los tiempos las clínicas Ruiz han sido un referente en cuanto al tema de salud en el estado, tanto, que hoy tienen laboratorios, clínica y farmacia.
Teniendo eso en mente, el nombramiento de el doctor Guillermo Ruiz Argüelles, fundador de la clínica Ruiz, como Secretario de Salud no resulta para nada descabellado, pero ¿qué hay de los posibles conflictos de interés que el dueño de una de las clínicas con más renombre en el estado pueda tener con las licitaciones a empresas y farmacéuticas durante su gestión?
Claro, esa es una pregunta que no tuvo ni tendrá respuesta porque justo a tres días de que Barbosa tome protesta, la eminencia médica que representa Ruiz Argüelles, declina el cargo.
En una carta el dueño de laboratorios Ruiz aclaró que su decisión se debe a motivos de salud y a sucesos familiares y se limita a colaborar en la medida de sus capacidades utilizando la figura de asesor del gobernador.
El problema aquí es que este sería el quinto elemento en el gabinete que se baja del tren, antes de si quiera arrancar la travesía.
Y porque claro, siempre podemos empeorar el panorama, algunos de los perfiles que entran son morenovallista de cepa y médula.
Una de ellas es Olivia Salomón Vibaldo, nada más y nada menos que la directora general de La Vista Contry Club y esposa del empresario y exadministrador fiscal del morenovallismo.
Así como lo leen, si bien se puede tratar de una estrategia para unir voluntades y caminar todos hacia delante, nos causa mucha extrañeza que se hable de una limpieza profunda en el sistema político poblano y que se usen las mismas herramientas, piezas y personajes.
¿Será acaso una limpieza por encimita? O ¿de verdad la 4T está haciendo milagros de conversión de voluntades?
