Iván Tirzo/ @TirzoIvan
Si hoy fuera el día de la jornada electoral, quien sea el candidato de Morena, gana.
Morena y los partidos de la coalición Juntos Haremos Historia no tienen rival en este momento.
En el PAN, los morenovallistas están huérfanos de un verdadero líder moral. Ni Antonio Gali, ni Marcelo García son los perfiles que cubren ese vacío que dejó Rafael Moreno Valle, quien falleció el 24 de diciembre de 2018.
Los panistas tradicionales van por el partido, este martes dieron muestra de ello, con la decisión que la dirigente estatal, Genoveva Huerta, hizo al de destituir a Marcelo García como coordinador de los diputados locales de Acción Nacional.
No era para menos, Marcelo terminó por entregarse a los morenistas, al votar en el Congreso del Estado a favor de Guillermo Pacheco Pulido, para ser designado gobernador interino.
Antonio Gali entregó el gobierno estatal a Morena, a eso se debieron sus constantes encuentros de la semana anterior con Olga Sánchez Cordero, secretaria de Gobernación Federal.
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Por parte del morenovallismo, Eukid Castañón aseguró hace unos días que abandona al grupo político, tras la muerte de su mentor, Rafael Moreno Valle.
Luis Banck está de brazos caídos, renunció a la jefatura que tenía en la administración estatal.
Los panistas tradicionales, quienes nunca han ganado una elección por sí solos en Puebla, aprovechan la desgracia de los morenovallistas para adueñarse del partido.
En el PRI no hay indicios que quieran resurgir y que quieran recuperar el estado.
Más bien, los priistas se les ve alineados al partido Morena para obtener posiciones políticas.
Los priistas aprovechan el noviazgo con Morena y el grupo de Miguel Barbosa, para entrar en el gobierno interino, de al menos, seis meses con Guillermo Pacheco Pulido.
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Ahora solo queda que en este partido de izquierda se pongan de acuerdo y postulen a un candidato sin salir tan raspados.
En este momento, es casi un hecho que Miguel Barbosa Huerta será otra vez el candidato a gobernador por la coalición Juntos Haremos Historia.
Se ve difícil que alguien más le gane esta posición, aun cuando haya morenistas más competitivos que él.